Vitoria - Hay situaciones en la vida que pueden parecer casualidades, pero que en la realidad están muy lejos de serlo. Una afirmación así se le podría aplicar a la presencia de Josean Querejeta en el palco del Santiago Bernabéu y sentado a la derecha de Florentino Pérez en la reciente visita del Deportivo Alavés al Real Madrid. Que la persona que rige los destinos de la entidad del Paseo de Cervantes estuviese al frente del club en dicho encuentro -una cuestión que no se repite demasiado- no es ninguna casualidad. Incluso, cayendo en la broma, hay quien pagaría lo suyo por saber y escuchar lo que los dos protagonistas hablaron a lo largo de toda esa jornada. No en vano, la relación entre ambos mandatarios es mucho más que cordial desde hace años -y eso a pesar de que Querejeta rechazase varias ofertas de Florentino Pérez para dirigir la sección de baloncesto madridista- y, recurriendo a las palabras de Gerard Piqué, seguramente en el palco del Bernabéu se trataron aspectos que pueden ser relevantes en el futuro del club vitoriano, que tiene un ojo puesto en la Casa Blanca.
Hay aspectos que no se ponderan excesivamente de la presencia de Querejeta al frente del Alavés. Uno de ellos, los lazos con los que cuenta el mandatario tanto con Barcelona como con Real Madrid. Han sido muchas horas de reuniones y negociaciones mano a mano con representantes de ambas entidades en el mundo del baloncesto, ya fuese en la ACB o en la Euroliga, y se le tiene en una consideración enorme por su capacidad gestora, negociadora y de emprendimiento. Virtudes que ha puesto históricamente sobre la mesa dirigiendo al Baskonia y que también ha exhibido al frente de El Glorioso. Por eso, por ejemplo, el club vitoriano fue elegido el pasado mes de noviembre -junto a Atlético de Madrid y Numancia- para el órgano de control de gestión de los derechos audiovisuales, en el que madridistas y barcelonistas son miembros fijos.
La excelsa relación con Florentino Pérez sirve, por ejemplo, para explicar la presencia de jugadores como Fernando Pacheco y Marcos Llorente en Vitoria. O, también, para que la cesión de Mariano se frustrase solo por el empeño del delantero y de su entorno de permanecer durante toda la temporada a las órdenes de Zinedine Zidane cuando desde la cima del propio club blanco se había dado carta blanca a su préstamo. Una línea directa entre las más altas esferas de la que muy pocas personas pueden presumir.
dos grandes aciertos En esta tesitura, desde el Alavés se mira con especial atención a todo lo que resulta interesante en la Casa Blanca. Ya sea a nivel del primer equipo, como, sobre todo, lo que ocurre en la ciudad deportiva de Valdebebas. Descartes, posibles cesiones, jóvenes que despuntan en La Fábrica... Todo se sigue con un interés desde el Paseo de Cervantes.
Una de las cuestiones trascendentales en la que están implicados ambos clubes es la situación de Fernando Pacheco. El Madrid conserva una opción de compra preferencial sobre el portero de solo cuatro millones de euros, pero en el Alavés existe cierta confianza en que dicha cláusula no sea ejecutada en el verano venidero y que el cancerbero pueda comenzar su tercera temporada como albiazul si es que no media una oferta mareante -su cláusula es prohibitiva- de un tercero.
También en clave de presente, otro nombre importante es el de Marcos Llorente. Al club vitoriano le gustaría seguir contando una temporada más con el mediocentro, al que en estos momentos rodea la incertidumbre. Todo el mundo da por hecha su presencia en la primera plantilla madridista la próxima temporada, pero eso está aún por ver y en el Alavés se mantendrán a la expectativa por si acaso por mucho que su regreso se antoje prácticamente imposible. Incluso, la opción de que Theo acabe vestido de blanco -o de blaugrana- se contempla como una posibilidad para solicitar una nueva cesión del lateral izquierdo ahora del Atlético.
Misma tesitura en la que se encontrará un Mariano que esta temporada no ha querido abandonar la disciplina blanca y que se ha quedado sin apenas jugar en todo el año. Desde el Paseo de Cervantes se ha preguntado por su situación reiteradamente y su nombre volverá a aparecer subrayado en rojo por si existen opciones de que en la campaña venidera salga cedido.
el castilla, una mina Llorente y Mariano militaban hace un año en el Castilla y, por eso, desde El Glorioso se mira con especial atención a Valdebebas y se sigue a esos jugadores que en verano podrían salir cedidos como paso previo a buscar su sitio en la primera plantilla madridista. Además, en las oficinas de Concha Espina hay una gran complacencia con el trabajo realizado por la entidad del Paseo de Cervantes en las operaciones recientes, ya que Pacheco y Llorente han crecido muchísimo durante su andadura en la capital alavesa y esa buena gestión sirve para mantener puertas abiertas de cara al futuro.
El talento rebosa a raudales en el filial dirigido por Santiago Solari y el Alavés, como tantos otros clubes, intentará pescar allí en el venidero verano. El club vitoriano ya se ha interesado por la situación del lateral derecho Achraf Hakimi y también por la del mediocentro Federico Valverde, ambos en edad todavía juvenil -cumplen 19 años en 2017 y a veces juegan en el equipo de su categoría, sobre todo en Youth League- y con una espectacular proyección. Lo mismo que Aleix Febas (21 años), el cerebro del equipo en el centro del campo. Calidad hay para regalar en ese equipo y no sería de extrañar que alguno de esos jóvenes talentos -que, además, no cuentan con salarios desorbitados y que suponen opciones muy apetecibles para el comprador- viva su año de adaptación a Primera vistiendo de albiazul.