Vitoria - Las vacaciones navideñas se convierten, año tras año, en la rampa de salida del inminente mercado invernal. Tanto jugadores como clubes toman posiciones para tratar de encontrar durante la ventana que se abre en el mes de enero la solución a sus respectivos problemas. El Deportivo Alavés no es una excepción y tiene acostumbrados a sus seguidores a completar varias operaciones en este período. Sin embargo, puede que en la presente temporada se salga de su norma habitual. Al menos, si se atiende a las palabras de Sergio Fernández. Y es que el director deportivo albiazul anunció ayer, en una entrevista concedida a la Cadena Ser, que la entidad de Mendizorroza “difícilmente” incorporará a ningún futbolista salvo que aparezca “un muy buen jugador”. Una circunstancia que, a su juicio, no suele producirse en un mercado invernal que tiene más que ver con las urgencias.

Además, el principal objetivo de la escuadra de Mendizorroza en las próximas semanas es que la puerta de sus oficinas se abra más para dejar salir que para entrar. Durante el pasado verano el equipo acometió una profunda reconstrucción que terminó produciendo una pequeña saturación en el vestuario, con cerca de una treintena de jugadores a disposición de Pellegrino. Algo a lo que se desea poner remedio cuanto antes. Manu Barreiro ha sido el primero en abandonar la disciplina del Glorioso pero, con toda seguridad, no será el último. “Nos gustaría dejar la plantilla en 22-23 jugadores”, advirtió Fernández.

De este modo, únicamente si las salidas terminan concretándose con rapidez y en el horizonte aparece algún producto muy atractivo terminará el Alavés decidiéndose a traer un nuevo inquilino al vestuario de Mendizorroza. O esa, al menos, es la declaración de intenciones oficial del club.

Víctor Vázquez Porque lo cierto es que, extraoficialmente, el nombre del conjunto vitoriano aparece continuamente vinculado a los más diversos objetivos. El último nombre en saltar a la palestra es el del centrocampista de 29 años y marcado carácter ofensivo Víctor Vázquez, enrolado en el Cruz Azul mexicano. Formado en la cantera del Barcelona, jugó durante cinco cursos en el Brujas belga, donde ganó la Liga y llegó a ser declarado mejor jugador del torneo. El pasado enero dio el salto pero no se ha adaptado al fútbol azteca y tanto el club como él buscan una salida. El principal problema es que todavía le restan dos años de contrato.

Por otro lado, Sergio Fernández desveló también que el contrato del vitoriano Gaizka Toquero contiene una cláusula que le permite renovar automáticamente “en función de una serie de circunstancias”.