VITORIA - Los movimientos del Alavés no solo son de entrada de jugadores sino que también pueden producirse salidas en la actual plantilla. La figura de Manu Barreiro no pasa desapercibida para los clubes que quieren reforzar su ataque y DIARIO NOTICIAS DE ÁLAVA ha podido confirmar la petición de cesión que llegó a la entidad vitoriana desde el Real Zaragoza en la tarde del jueves para hacerse con el delantero gallego. La respuesta inicial desde el Paseo de Cervantes fue negativa hacia la idea de desprenderse de un jugador como Manu Barreiro que aún tiene un año de contrato más. Sin embargo la insistencia de los aragoneses por reforzar su delantera llevó al director deportivo Narciso Julia a ponerse ayer al frente de las operaciones para tratar de convencer al club y jugador a la hora de facilitar su salida con rumbo a orillas del Ebro en la capital maña.

El Real Zaragoza busca un delantero de potencia y envergadura con el que redondear la guinda a su proyecto y encarar la temporada con el ascenso como gran objetivo para el conjunto dirigido por Luis Milla y que parte con máxima presión.

De entrada el Alavés no quiere desprenderse del jugador y plantea las lógicas reticencias para tratar de no conceder facilidades desde el primer momento y hacerse fuerte. Sin embargo nunca ha escondido la dirección deportiva que le gustaría poner el colofón a la catarata de 16 fichajes con una gran incorporación en la delantera y que pueda paliar la carencia que ha demostrado en la pretemporada ante la meta rival. En esa tesitura la posición de Manu Barreiro queda en entredicho y en posición de debilidad. No se intuye que vaya a tener muchos minutos el jugador fichado del Racing de Ferrol hace dos veranos en una línea de vanguardia en la que tiene una dura competencia con Christian Santos y el brasileño Deyverson. Estos dos parten con un inicial ventaja en la pugna por la titularidad y cerrarían el paso para que Barreiro tuviera minutos importantes en su estreno en Primera División.

ÚLTIMO DELANTERO El trabajo de Sergio Fernández se ha encaminado a construir el bloque que manejará Mauricio Pellegrino en el retorno del Alavés a Primera División, pero siempre ha tenido una idea en la cabeza de poder rematar todo el trabajo con una última contratación en forma de un gran delantero que asegure goles y tenga tirón mediático para los aficionados. En ese rompecabezas el Alavés se habría fijado en el barcelonista Munir, el madridista Mariano y hasta en Sergio León, máximo goleador del pasado curso en segunda, como gran colofón para la plantilla. De lograr alguna de esas piezas, un delantero como Barreiro quedaría relegado a un papel residual. Sin embargo el hispano-marroquí va a ser la estrella de esta recta final del mercado estival y puede entrar en una operación que lleve al valencianista Alcácer a Barcelona. Mariano está en el punto de mira del Villarreal como relevo de Soldado y Sergio León tiene una cláusula de más de un millón de euros como grillete que le retiene en el Elche y le impide progresar.