VITORIA - Las cuentas están claras para el Alavés que ya sabe que el ascenso a Primera División pasa por vencer el domingo al Numancia en Mendizorrotza sin tener que atender a los resultados del Nastic de Tarragona o el Leganés.
Se cumplen todos los deseos del club y seguidores que descuentan ya las horas que faltan para que el domingo, al filo de las 22.00 horas, todo Mendizorrotza estalle de júbilo tras asegurar los tres puntos que devolverán al Alavés a la Liga BBVA.
Los de José Bordalás han dado carpetazo a la jornada 40 una vez más con un balance positivo para sus intereses. El apurado triunfo del miércoles ante el Osasuna, con el lanzamiento de falta directa de José Naranjo, puso en la tesitura de tener que sumar también los tres puntos en Lasesarre para poder seguir teniendo en su mano todos los boletos del ascenso.
A falta de solo dos partidos por jugar el Alavés sigue al frente de la tabla, con 71 puntos, seguido del Leganés, con 68, y el Nastic de Tarragona con 67.
Los madrileños accedieron al segundo lugar tras vencer al Real Oviedo en el Carlos Tartiere con el tanto de Gabriel, en el minuto 61. Pudieron empatar los carbayones pero Susaeta desperdició una pena máxima cuatro minutos después del gol pepinero.
El domingo, en jornada unificada a las 20.00 horas, el Alavés recibirá al Numancia, el Leganés hará lo propio con el Llagostera y el Nastic de Tarragon viaja a Lugo. Los de José Bordalás ya saben que con un triunfo ante los sorianos que nada se juegan en el envite certificarán su condición de equipo de la Primera División después de diez temporadas.
Será una apacible jornada en la que los únicos nervios se vivirán en el Paseo de Cervantes a la espera de que lleguen los tantos que sirvan para derrotar a los sorianos. No hará falta estar atentos a los transistores ni a los resultados de Butarque y el Anxo Carro porque solo el Alavés lo tiene en su mano y con el gran premio a la vuelta de noventa minutos.
Los madrileños se la jugarán ante un Llagostera metido en la pelea por salvar la categoría y el Nástic se mide a un Lugo que ya nada tiene en juego y se encuentra de vacaciones. El triunfo albiazul le llevará al jardín de la Primera División y optar al título liguero en la jornada 42.
En el partido de ayer en Lasesarre a pesar de los altibajos y vaivenes en el marcador, tras la igualada a dos tantos, solo hubo cinco minutos de zozobra en los que sintió el Alavés los dos puntos que, momentáneamente, se quedaban por el camino. Esa hipotética igualada hubiera dificultado el camino a Primera y a echar un vistazo al resultado del domingo de los tarraconenses en tierras gallegas y al marcador de Butarque ante el Llagostera.
El gol de Manu García puso fin a esos instantes de duda que se vivieron sobre Lasesarre y entonces las manecillas del reloj empezaron a ralentizar su caminar hacia el pitido final. Se hicieron eternos esos veinte minutos hasta que llegó la explosión de júbilo final y el anticipo para el que ya se prepara Mendizorrotza en poco más de 48 horas.