vitoria. El próximo rival del Deportivo Alavés llega a la cita de Mendizorroza como mínimo igual de necesitado que el combinado de Natxo González. Probablemente más, porque el nivel de exigencia al que debe hacer frente un Hércules que hace muy poco competía en Primera División dista bastante del un Glorioso que acaba de regresar a la categoría de plata después de demasiado tiempo en el pozo de la Segunda B. Sin embargo, ambas escuadras tienen seis puntos y se encuentran justo en la frontera de caer a los puestos de descenso. Con este panorama, se entiende a la perfección la trascendencia que tiene la contienda para ambos. Probablemente por ello, el combinado ilicitano está tratando por todos los medios de recuperar al central Noe Pamarot, que se perdió el último compromiso ante el Dépor por una lesión muscular y, a priori, estaba descartado para la cita del domingo.
Sin embargo, el futbolista francés ya ha comenzado a ejercitarse y espera reintegrarse hoy mismo al trabajo normal con el resto del grupo para tratar de estar a toda costa disponible para el técnico Quique Hernández. Quien también estará seguro en condiciones de jugar será el zaguero asturiano Aitor, ya restablecido de sus molestias. Algo que no ha podido hacer el exalavesista Gorka Azkorra, que se perderá la cita.
Por parte albiazul, la enfermería deparó ayer la buena noticia de que Carlos Lázaro ya ha comenzado a correr y se espera que se vaya incorporando paulatinamente al trabajo normal con el resto de jugadores. Laborda y Unai Medina, sin embargo, deben continuar con su proceso de recuperación al margen del grupo. Juanma, por su parte, ya se encuentra en perfectas condiciones tras superar la sobrecarga en el cuádriceps que le impidió ser de la partida en Alcorcón y podrá actuar ante el Hércules si Natxo González lo estima conveniente.
Por otro lado, Óscar Rubio, una de las voces más autorizadas del vestuario de Mendizorroza, analizó ayer la situación del equipo después del inesperado borrón protagonizado el pasado sábado. "En la Segunda División las diferencias son tan mínimas que da igual con quién te enfrentes. Lo importante es cómo estemos nosotros. En casa la línea que llevamos es muy buena y, si salimos como en los últimos partidos, tendremos muchas oportunidades de ganar, aunque está claro que es un encuentro importante ante un rival directo", valoró.