Vitoria. Fenomenal en el apartado anímico, pero extremadamente dañina en el aspecto físico y en la evolución del equipo. Así ha sido la primera eliminatoria de Copa del Rey para el Deportivo Alavés, que tiene que aprovechar el subidón moral de su primera victoria de la temporada y dejar atrás sus problemas con las bajas de muchos lesionados para inaugurar en Murcia el casillero de triunfos en la competición liguera. "La victoria en la Copa nos tiene que servir para seguir manteniendo la autoconfianza y encontrar la fórmula para ganar. Ha sido positivo de cara a la Liga", aseguró un Natxo González que, al mismo tiempo, también señaló que desde el apartado físico ese partido contra el Zaragoza ha cortado la evolución que venía manteniendo el equipo durante las últimas semanas.

Tras ese primer triunfo del curso, el preparador vitoriano espera que su equipo mantenga en Murcia el nivel mostrado en sus últimos compromisos, aunque tiene claro que el buen número de oportunidades generado tiene que venir acompañado de un incremento en el acierto en los remates: "Lo fundamental es generar ocasiones y en Liga, después de la primera jornada, lo hemos hecho. A partir de ahí, hay que buscar eficacia. Estamos siendo eficientes, pero no eficaces. De lo contrario, llevaríamos un mínimo de cuatro puntitos más".

Acertar con las ocasiones propias y cerrar también las vías de agua defensivas, sobre todo las sufridas en las jugadas de estrategia y que tan caro han costado ya. Más aún teniendo en cuenta que el conjunto pimentonero ha marcado seis de sus nueve goles a balón parado. "Hay que contrarrestrar las acciones a balón parado, ya que tienen buenos lanzadores y son fuertes en el juego aéreo. Tenemos que evitar faltas que estamos cometiendo, que son innecesarias y que están propiciando goles", enfatizó Natxo.

A partir de ahí, el técnico alavesista apuesta por mantener el estilo de los últimos partidos y tratar de llevar el ritmo para que se juegue a lo que quiera el propio conjunto vitoriano. En este sentido, el entrenador de Ariznabarra le concedió una especial atención a la salida de la presión del rival tras recuperación y a elegir el momento oportuno para atacar en velocidad o manejar el esférico con un punto más de tranquilidad.

"Es un equipo que presiona muy bien la pérdida de balón, pero si la superamos vamos a tener espacios para correr. Hay que elegir bien cuándo es el momento de contraatacar o el de tener mayor posesión. Eso fuera de casa lo estamos manejando bastante bien, manteniendo el control de los partidos y es nuestro objetivo en Murcia, que el partido se juegue como queremos", explicó el técnico albiazul, que también destacó que más allá de las sobresalientes cifras realizadoras del Murcia, el rival de mañana también es un equipo que encaja muchos goles, le han metido dos tantos en cada partido en casa y todavía no ha ganado como local.

Buscará el Alavés su primera victoria en Liga muy mermado de efectivos. Tanto que la convocatoria de dieciocho jugadores que esta mañana pondrá rumbo a Murcia -el viaje se hará en avión y habrá un entrenamiento por la tarde en la capital pimentonera- la completa un Nano que se espera que esté completamente restablecido el domingo del esguince de tobillo que sufrió el pasado martes ante el Zaragoza. El lateral izquierdo es el único que ha podido recuperarse a tiempo, ya que los otros cinco lesionados (Mora, Beobide, Jarosik, Lázaro y Laborda) se mantienen al margen del grupo. También está en la citación Quiroga, del que Natxo González espera que pueda disputar algunos minutos.