Vitoria. Con la plantilla prácticamente cerrada con la oficialización ayer de la llegada como cedido de Toti y a la espera de que en las últimas horas se pueda producir un último retoque, Natxo González pintó de verde el futuro del Deportivo Alavés, ya que considera que los mimbres que se han juntado son buenos, pero al mismo tiempo solicitó un poco de paciencia porque van a ser necesarias unas "cuatro o cinco semanas más" de trabajo para que el bloque se ponga a punto físicamente y se compenetre.
"Estoy satisfecho. La verdad es que estoy contento porque es un equipo bonito, competitivo, con mucha ilusión. Un equipo que está construyéndose y que cuando todos estén en un buen estado de forma va a ser un gran equipo", aseguró el preparador vitoriano.
La plantilla siga con su particular puesta a punto y el técnico ve complicado fijar un plazo temporal para saber cuándo van a estar todos en buenas condiciones, aunque considera que en poco más de un mes el equipo tiene que ofrecer una versión muy fiable: "La semana que empezábamos la competición ya decíamos que me hubiera gustado tener una o dos semanas más para seguir trabajando. Hemos empezado la séptima semana y los conceptos ya se va adquiriendo. Ahora depende un poquito del estado de forma de los jugadores. En cuatro o cinco semanas creo que vamos a ver a los futbolista con un estado de forma interesante y el equipo lo notará".
Jarosik y Toti han sido los últimos en incorporarse, aunque el responsable espera algún movimiento final para completar el centro del campo. Del checo, más allá de sus virtudes futbolísticas, valora muy positivamente su "experiencia y trayectoria profesional", cualidades que tienen que servir para el crecimiento del grupo. No en vano, y con el objetivo de que vaya entrando en la dinámica de trabajo y que conozca a los compañeros, el central será hoy uno más en la expedición a Córdoba, una cita en la que también se estrenará Nano una vez recuperado de su lesión. Por su parte, del extremo destacó su "buen golpeo de balón con ambas piernas y con desequilibrio por ambas bandas".
De cara al compromiso en El Nuevo Arcángel, Natxo González espera mantener la buena línea exhibida ante el Las Palmas, aunque considera que el partido va a ser diferente por jugar a domicilio ante un equipo que está de dulce. "Nos vamos a enfrentar a un equipo que ha empezado bien, que está en una buena dinámica y me imagino que allí todo será euforia. Los objetivos son claros, ascender o ascender, y ahora mismo están en esa buena dinámica. Eso puede ser un arma de doble filo y lo que tenemos que intentar es que esa euforia se vuelva en su contra", señaló.
El técnico vitoriano radiografió una por una todas las líneas del Córdoba y destacó que "defensivamente tratan de apretar mucho y de hacer la presión muy arriba", mientras que "ofensivamente es un equipo que ofensivamente le gusta dominar los partidos con el balón" y destacó su peligro en las acciones de estrategia.
En este sentido, la herida del gol marcado por el Las Palmas aún no ha cicatrizado y tiene que servir como experiencia para que no se repita un fallo de esa magnitud: "Trataremos de prevenir para que no vuelva a ocurrir que un despiste de esos nos provoque la pérdida de puntos. Pero se trata de una dinámica de la categoría, ya que ves vídeos de los partidos y el tanto por ciento de goles a balón parado es increíble porque también hay mejores lanzadores".