JAÉN. Apostó de salida Natxo González por los tres centrales y estos se convirtieron en los valladares de un equipo que lo pasó mal por las bandas y que apenas generó nada reseñable en ataque en una primera parte en la que no tuvo opción alguna. Cerrado el centro, el Jaén buscó las incorporaciones por los flancos, pero se topó casi siempre con Luciano, Agustín y Javi Hernández, soberbios en la contención.
Enfilaba la primera parte su tramo final cuando en una de esas internadas jiennenses el balón se fue a córner. Es una de las grandes virtudes del Jaén y lo sabía el Alavés, pero la ejecución fue brillante y tras romper desde atrás Servando cabeceó solo el centro de Isra Jerez. Testarazo cruzado y abajo imparable para Crespo y que ponía en ventaja a los de Manolo Herrero en el minuto 38, evidenciando que el Alavés necesitaba una enorme mejoría en su juego si quería llevarse un resultado positivo de su visita a La Nueva Victoria.
Le dio un nuevo aire al equipo Natxo González en el descanso con la entrada de Guzmán y el regreso al 4-2-3-1, pero se encontró el cuadro albiazul con demasiada posesión de balón y ahí salieron a relucir sus males en la elaboración, ya que las únicas acciones de peligro llegaban a través de los desplazamientos en largo buscando a Juanma.
Con el paso de los minutos el poderío alavesista se fue imponiendo y el Jaén se vio obligado a retroceder muchos metros. Pero de ese dominio apenas surgieron un par de faltas peligrosas al borde del área ?la primera de ellas bien pudo ser dentro? que no fueron aprovechadas. Ni siquiera cuando los locales se quedaron con diez por expulsión de Nino fue capaz el Alavés de poner a prueba a un Toni García que no recibió ni un solo disparo en todo el partido.
La fe y unas piernas inconmensurables salvaron a los vitorianos de un resultado muy peligroso. Un claro derribo de Villa a Guzmán en el área fue castigado con penalti y Viguera igualó desde los once metros en el minuto 92, un gol que otorga una pequeña ventaja al Alavés de cara a la vuelta del sábado en Mendizorroza, donde espera el ascenso a Segunda División.