vitoria. La fecha de ayer martes, 7 de mayo de 2013, difícilmente se borrará de la memoria de Rubén Negredo. Y es que después de muchos meses de duro y esforzado trabajo en solitario el delantero madrileño por fin pudo volver a ejercitarse junto a sus compañeros a las órdenes de Natxo González. La buena noticia, en realidad, la había recibido el lunes, cuando los galenos albiazules le comunicaron que disponía ya del alta médica. Sin embargo, como quiera que ese día el resto de la plantilla disfrutaba de su jornada de descanso no fue hasta ayer cuando pudo revivir las sensaciones de ser uno más.
Atrás quedan ingentes horas de esfuerzo en la recuperación de la rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda que se produjo el lejano 23 de octubre del año pasado. Casi siete meses después, el jugador puede dejar atrás definitivamente la enfermería y recuperar su mejor estado de forma sobre el césped. Un camino el que tiene por delante que sin duda tampoco será sencillo pero que seguro que resulta mucho más agradecido para él que todo lo anterior.
Y es que desde que en aquel fatídico entrenamiento vespertino el futbolista madrileño vio cómo se le quedaba la articulación "enganchada" tras un choque fortuito con Kevin Calle, han sido varios los varapalos a los que ha tenido que hacer frente. El primero, el grave diagnóstico, que suponía de entrada perderse el atractivo emparejamiento de Copa del Rey con el Barcelona y para colmo decir prácticamente adiós a toda la temporada. Por esto no hubiera sido suficiente, algo más de un mes después de pasar por el quirófano tuvo que volver a ser intervenido al aparecer una infección en la rodilla operada. Por último, y ante la evidencia de que no iba a poder contar con sus servicios este curso, el club le retiró la ficha para poder incorporar a Gorka Laborda en el mercado de invierno. Como consecuencia, aunque en estos momentos ya dispone del alta médica, Negredo no podrá volver a jugar con el Alavés en competición oficial esta temporada.
En cualquier caso, el simple hecho de ser uno más sobre el césped ya es una excelente noticia para el delantero, que apoyará a sus compañeros en busca del ascenso como un aficionado más desde la grada. Eso sí, lo que tampoco tiene claro es su futuro, puesto que firmó un contrato por una temporada y, de momento, no hay oferta de renovación a la vista.
Al margen de la reaparición de Rubén Negredo, la otra noticia del entrenamiento de ayer tiene como protagonista a un compañero de demarcación del madrileño, aunque en este caso no es tan agradable. Y es que Juanma, uno de los jugadores de la plantilla que en mejor forma se encuentra en la actualidad, debió abandonar la sesión de trabajo antes que sus compañeros debido a unas pequeñas molestias musculares en la parte posterior del muslo.
En principio, este problema no tiene especial relevancia y no debería impedir al delantero valenciano ser de la partida en el importante encuentro del próximo domingo ant el Tudelano. Teniendo en cuenta los precedentes de este curso, no obstante, toda precaución es poca.