Vitoria. El Alavés soñaba ya con llevarse los tres puntos de vuelta a casa cuando el realista Txomin congeló al equipo vitoriano anotando el empate en el descuento. La gélida temperatura con la que Zubieta recibió a los albiazules tuvo su punto álgido en un mazazo in extremis que dejó al conjunto de Natxo González sin el triunfo cuando lo rozaba ya con las yemas de los dedos. La acción del jugador txuri urdin anuló el gol inicial de Gorka Laborda en una acción mal defendida por la zaga vitoriana. Para Natxo González, el empate evidenció lo que para él es una constante a lo largo de esta temporada: la falta de gol de sus pupilos.

"Este resultado es responsabilidad nuestra. Ha sido un partido en el que teníamos que haber llegado al minuto 90 con una mayor diferencia en el marcador. Son ya muchos encuentros que acabamos ganando por 1-0 o 0-1 y algún día tenía que pasar lo que nos ha pasado hoy", lamentó el preparador alavés, que no quiso poner ninguna excusa por las malas condiciones climatológicas en las que se disputó el duelo, marcado por la nieve y la baja temperatura. "El tiempo no ha tenido nada que ver. El campo estaba bien y no ha hemos tenido ningún problema en ese sentido", descartó González, visiblemente molesto con la escasa puntería de su equipo contra la Real Sociedad B.

Un lastre que, en realidad, el conjunto alavesista lleva padeciendo toda la temporada. "No estamos siendo contundentes en los últimos treinta metros y eso es lo que diferencia a un buen equipo de uno grande. No somos un equipo matador. El problema de los goles a favor es algo que venimos arrastrando mucho tiempo y hoy lo hemos pagado. Llegamos al área rival, pero no acabamos de tener ese instinto necesario", criticó el entrenador, insatisfecho una vez más con la poca eficiencia ofensiva. "¿Cuántas veces ha tirado la Real a portería? Creo que sólo la del gol. Cuando hablo de la diferencia entre un buen equipo y uno grande es ésa la diferencia", incidió de nuevo, dejando bien clara su insatisfacción.

Por su parte, el autor del único tanto del Alavés, Gorka Laborda, admitió que el gol final de la Real dejó un poco tocados a los jugadores. "Nos ha costado muy cara esa jugada. No hemos sabido mantener el resultado a favor, perdiendo tiempo o como sea. Estoy contento por mi gol pero el empate es una lástima", admitió finalmente Laborda.