La principal sorpresa en el entrenamiento matinal de ayer en Ibaia del Deportivo Alavés fue el trabajo en solitario que desarrolló Agustín Fernández. El central acumuló mucho esfuerzo la semana pasada con los 120 minutos en la Copa y otros 90 ante el Peña Sport después de dos meses en el dique seco y ayer realizó un trabajo más suave que sus compañeros para evitar una posible sobrecarga.