Vitoria. En poco más de dos meses en el Deportivo Alavés, Nacho González ya ha dejado claro que no es de esos entrenadores que busca una excusa al mínimo inconveniente que se encuentre en su camino. La plaga de lesiones que padece la plantilla del Deportivo Alavés ha dejado al técnico vitoriano sin hasta cinco jugadores que, en condiciones normales, serían fundamentales en sus esquemas y, pese a ello, lo único que le interesa es seguir sumando puntos al mostrar una confianza plena en los dieciséis jugadores desplazados hasta Teruel en la cuarta jornada liguera. "Hay que buscar soluciones, pero habrá un equipo competitivo en Teruel", aseveró el preparador albiazul.

Nacho González se olvida de esos problemas por las múltiples ausencias y también pone una barrera a la euforia generada en torno al equipo tras cinco victorias consecutivas repartidas entre Liga y Copa del Rey. Es el vitoriano de lo que creen en el dicho de que agua pasada no mueve molino y considera que esos éxitos no sirven para predecir futuras victorias. Por eso, el objetivo no es otro que seguir acumulando triunfos, pero sin regodearse en los ya conseguidos.

"El reto es siempre tratar de ganar, en este caso prolongar la dinámica en la que estamos. Pero lo importante es no pensar en lo que se ha hecho hasta ahora; de lo contrario, nos equivocaríamos. Es un partido de Liga más, siempre vamos a trabajar para ganar y no dejarnos llevar por el pasado, ni para lo bueno ni para lo malo", señaló el técnico alavés a la conclusión del entrenamiento matinal de ayer en Mendizorroza.

Eso sí, el preparador vitoriano considera que los partidos precedentes, sobre todo el último en el que el Atlético Sanluqueño incluso llegó a poner en jaque al Alavés, tienen que servirle al equipo como aprendizaje para resolver en el futuro complicaciones similares a las vividas el pasado miércoles.

"Vas viviendo diferentes experiencias y vas poniendo soluciones aplicando esas experiencias. Hasta ahora las cosas nos iban de cara. El otro día en el segundo tiempo apretamos más, fue un partido muy equilibrado, pero sabíamos que el desgaste iba a ser muy importante y que al final íbamos a ser un poco superiores al rival, como se vio en el segundo tiempo. Son experiencias y situaciones que se van dando y que son buenas para saber cómo tenemos que responder en cualquier momento", explicó.

Por último, Nacho González valoró al Teruel como un equipo "bien organizado, que trabaja bien en bloque y que cuenta con recursos a balón parado y al contragolpe", al mismo tiempo que alaba su capacidad defensiva, demostrada en su visita a Barakaldo donde aguantó el empate casi todo el partido a pesar de contar con un jugador menos.