vitoria. Dispuestos a proseguir la racha que les ha llevado a clasificarse para la segunda ronda copera y ha comenzar la liga con victoria a domicilio -todo ello sin encajar un sólo tanto-, los componentes del Deportivo Alavés se han conjurado para sacar adelante el estreno en Mendizorroza de este curso 2012-13.
Nacho González personifica esas intenciones tal y como revelaba en la mañana de ayer tras el entreno a puerta cerrada concebido para ultimar la preparación de este debut casero. "Nos apetece jugar como locales y experimentar el ambiente y todo lo que rodea a este campo", aseguraba. El entrenador gasteiztarra pretende dejar un buen sabor de boca a la parroquia alavesista, consiente de que existe cierta expectación por certificar la buena marcha, en este principio de temporada, del equipo. "Quiero que la gente se vuelva a ilusionar", concedía.
Racha e ilusión van de la mano y, tras este buen arranque, el equipo se encuentra en una inmejorable posición para enfatizar ambos conceptos. La razón reside en los dos encuentros consecutivos que el Deportivo Alavés jugará en Mendizorroza. Primero, el S.D. Logroñés y el próximo fin de semana el Real Unión serán las escuadras visitantes del estadio asentado en el Paseo de Cervantes.
González ha confesado lo especial para él de un encuentro que será el culmen de sus conjeturas más optimistas del pasado. "Es una sensación especial. He visto muchísimos partidos en este campo desde arriba y siempre pensabas si algún día te tocaría estar ahí abajo y ha llegado este momento, por lo tanto será un día especial para mí", admitía.
No cabe duda de que el preparador habrá trasladado esta idea a una plantilla que acoge un grado de identificación con el territorio nunca visto, por ello se espera un Deportivo Alavés aguerrido e implicado. El prólogo ha sido esperanzador, sólo queda corroborarlo a base de victorias que lleven al club a pelear por el anhelado ascenso. Un objetivo que pasa por hacerse fuertes en Mendi. Hoy arranca esta particular liga.