Vitoria. Dicen que conocer bien la historia es la mejor manera de aprender de los errores cometidos para no repetirlos. Sin embargo, en el actual momento de grave crisis que atraviesa, mirar hacia atrás no le es de gran ayuda al Deportivo Alavés. Y es que los antecedentes no ofrecen demasiados elementos para la esperanza del combinado albiazul. Más bien todo lo contrario. Porque desde la temporada 2000-01, es decir, los últimos once ejercicios completados, únicamente dos equipos -teniendo en cuenta cada año los cuatro grupos de veinte escuadras que integran la Segunda División B- han sido capaces de reponerse a una situación como la que vive El Glorioso. Así, sólo Espanyol B y Hospitalet han podido enjugar la desventaja de seis puntos que les separaba de las posiciones de play off a falta de disputar los últimos seis partidos del campeonato para acabar peleando por el ascenso en la liguilla posterior.
Ese es el clavo ardiendo al que se aferra en estos instantes el plantel de José Carlos Granero y todos sus desencantados seguidores. Se trata, sin embargo, de una posibilidad más que remota teniendo en cuenta que el balance entre el éxito y el fracaso en esta tesitura se inclina clarísimamente hacia los que sucumbieron por el camino. Once temporadas, ochenta equipos por campaña y sólo dos finales felices. Casi nada. En cualquier caso, es lo único que le resta al cuadro del Paseo de Cervantes tras la interminables sucesión de decepciones que ha ido protagonizando.
Por ello, los ejemplos de Espanyol B y Hospitalet deben estar marcados a fuego en la mente de todos los inquilinos del vestuario de Mendizorroza para tratar a toda costa de repetir sus pasos. El filial periquito fue el primero el firmar la proeza a la que se ha obligado El Glorioso. En la trigésima segunda jornada de la temporada 2000-01, el conjunto blanquiazul marchaba noveno con 48 puntos en su casillero, a seis de distancia de los puestos de play off. Seis encuentros después o lo que es lo mismo a la conclusión de la Liga regular, había ascendido hasta la cuarta plaza, haciéndose con el último billete para disputar la fase de ascenso, con 64 puntos.
Es decir, que en ese periodo de competición firmó un espectacular balance de cinco victorias y un empate que le permitió remontar nada menos que cinco posiciones en la tabla clasificatoria y, aunque con muchos apuros, disfrutar del premio extra de la post temporada. El gran damnificado de su reacción fue el Novelda. El cuadro alicantino era cuarto a falta de seis jornadas y pese a que en esos duelos logró tres triunfos y un empate -un expediente más que aceptable en circunstancias normales-, finalmente se quedó fuera de la fase de ascenso al concluir la campaña quinto igualado a 64 puntos con el Espanyol B.
Máxima emoción El mejor balance en sus enfrentamientos directos -en la decimoséptima jornada se impusieron los catalanes 3-0 y en la trigésima sexta hicieron lo propio a domicilio (1-3)- terminó inclinando la balanza a favor de los barceloneses. Sin embargo, la emoción estuvo presente en su particular duelo hasta el último segundo. Y es que en la última jornada del campeonato ninguno de los dos fue capaz de saldar su respectivo compromiso con victoria y debieron contentarse con sendos empates, por lo que si el Novelda hubiese sido capaz de desequilibrar las tablas que reflejó el marcador final (3-3) de su partido en casa contrael Sabadell -finalmente tercero y que luchaba por la segunda plaza-, habría echado al traste la remontada periquita. Porque el Espanyol B, tampoco pudo pasar del 0-0 en su visita a un Mataró que peleaba por eludir el descenso.
El otro caso que aporta un mínimo rayo de esperanza a la situación del Alavés tiene como protagonista al Hospitalet y data del ejercicio 2006-07. Entonces, a estas alturas de la temporada, la escuadra catalana era novena con 46 puntos en su casillero y le separaban seis de la cuarta posición que ocupaba el Villajoyosa (igualado a 52 puntos con Huesca, tercero, y Alcoyano, segundo). Seis jornadas más tarde, sin embargo, la clasificación había dado un vuelco espectacular.
De esta manera el Alicante, que mes y medio antes era quinto con 50 puntos, se proclamó campeón con 65. Huesca y Alcoyano se intercambiaron sus posiciones para acabar segundo y tercero con 62. Y, por último, el Hospitalet conquistó el último billete para disputar el play off de ascenso con 61.
Gracias a sus cinco triunfos y una única derrota (precisamente contra el primer clasificado definitivo), el combinado barcelonés protagonizó el gran salto que aspira a repetir en la actual temporada el Deportivo Alavés. El gran perjudicado entonces fue el Terrasaa, que pasó de comandar la tabla clasificatoria en la trigésima segunda jornada con 53 puntos a acabar en una más que decepcionante novena posición con 59. Un hundimiento del que supieron sacar buen partido Alicante y Hospitalet.
En cualquier caso, El Glorioso tendría que mejorar todavía más los registros de Espanyol B y Hospitalet, puesto que ninguno de los dos fue capaz de lograr ascender en la posterior fase de ascenso, gran objetivo de los albiazules.