vitoria. "Lo normal es que no haya más incorporaciones pero es un poco arriesgado decirlo cuando queda tanto tiempo hasta el día 31. Siempre puede surgir algo que sea irrechazable y que entendamos que puede mejorar". De esta manera un tanto ambigua se refirió Dani Barroso ayer a la presencia del Deportivo Alavés en el mercado de invierno que recientemente acaba de cruzar su ecuador.

Tras cerrar las incorporaciones de Rubén Palazuelos, Meza Colli y Kike Tortosa -presentado ayer de manera oficial- y las salidas de Dennis Nájera y Luisma, la secretaría técnica ha frenado sensiblemente la intensidad de sus gestiones pero no ha puesto de momento el punto final definitivo a las mismas. Y es que el frenesí que normalmente suele acompañar a las últimas jornadas de este siempre intenso mercado invernal podría deparar algún movimiento más dentro de la plantilla vitoriana que modificara la fisonomía de la misma.

Al menos, con las operaciones cerradas hasta el momento, El Glorioso ha conseguido uno de los objetivos con los que se adentró en este periodo de incorporaciones. "Con la llegada de los nuevos fichajes generamos una serie de alternativas distintas a los equipos contrarios que yo creo que nos da riqueza ofensiva. Era algo que el equipo necesitaba, lo hemos conseguido y ahora hay que tener la suerte de que las cosas les vayan bien", sostuvo ayer Dani Barroso.

No obstante, el secratario técnico se mantiene atento a los vaivenes del mercado y a los posibles chollos de última hora que puedan surgir aunque para poder aprovecharlos el conjunto vitoriano debería liberar alguna de las fichas que en estos momentos tiene ocupadas.

Uno de los posibles candidatos para esa operación podría ser el sevillano Pablo Gallardo siempre que su proceso de recuperación de la importante lesión de cadera que se produjo durante la pretemporada no culmine con éxito. No obstante, Barroso aseguró que el central va "según los plazos previstos" aunque aún no está "para jugar".