NO, no es que siguiendo el ejemplo de los parados de la NBA los dos equipos más representativos e históricos de Argentina hayan decidido acometer una gira mundial con escala en la capital alavesa. Ambos continúan compitiendo en su país de origen aunque, eso sí, en categorías diferentes puesto que los millonarios purgan desde hace unos meses sus pecados en la Segunda División. Sin embargo, este sábado se podrá presenciar en las gradas del Paseo de Cervantes lo que podría considerarse un remedo del gran clásico por antonomasía del país sudamericano.

Y es que el derbi que enfrentará a Deportivo Alavés y Sestao se ha visto salpicado inevitablemente por los vínculos que ambas entidades han mantenido a lo largo de su historia con las entidades bonaerenses. Especialmente, en el caso del combinado vizcaíno que, desde su refundación en 1996, se bautizó oficialmente como Sestao River.

No contentos con ello, sus responsables decidieron el pasado verano tributar un homenaje a su querido River Plate para ayudarle a sobrellevar los difíciles momentos que estaba atravesando como consecuencia de su histórico descenso a la categoría de plata. Para ello, decidieron que la segunda equipación que lucirían sus jugadores en el presente ejercicio tendría el mismo diseño que la de la escuadra argentina. Además, en la espalda se incluyó el lema "¡Aguante River!". Sólo la presencia de uno de los Altos Hornos en el pecho y unos ribetes verdinegros -colores tradicionales del Sestao- la diferencian de la que han lucido futbolistas históricos del fútbol mundial.

Esta iniciativa no ha pasado ni mucho menos desapercibida y, especialmente en Argentina, ha tenido un eco inesperado. Hasta el punto de que en las oficinas del club vizcaíno se acumulan las solicitudes de estas elásticas.

Los aficionados del Alavés también han sido conocedores de este hecho y no les ha costado demasiado echar la vista atrás hasta el momento más glorioso de la nonagenaria historia del club. Cuando el equipo dirigido por Mané disputó la final de la Copa de la UEFA de 2001 ante el Liverpool ataviado con una camiseta prácticamente idéntica a la del Boca Juniors. Así, ha surgido la iniciativa de rebuscar en los armarios para acudir el próximo sábado a Mendizorroza enfundados en esta histórica zamarra y vivir un particular clásico argentino animando al Boca Deportivo Alavés frente al Sestao River Plate en el estreno de Granero en casa.