Vitoria. La de ayer fue una sesión de trabajo de estrategia, sobre todo desde el punto de vista ofensivo, para los pupilos de Luis de la Fuente. El preparador alavesista y sus jugadores son conscientes de que las jugadas a balón parado son fuente de ganancia y pérdida de puntos y pretenden convertir este arma en una amenaza y dejar de sufrirla en carnes propias como ha ocurrido en los tres goles que ha encajado Rangel esta temporada.

"Son situaciones a las que se saca mucho partido y hay que trabajarlas. Hay margen de mejora porque hay que coger automatismos para coordinarse y eso requiere un tiempo de adaptación, aunque tampoco hay que obsesionarse demasiado porque esas acciones han venido propiciadas porque íbamos por delante en el marcador y el rival se ha volcado tirando balones al área. Si el resultado hubiese sido otro, las circunstancias también habrían sido diferentes", indicó Rangel tras el entrenamiento.

El exguardameta del Castellón compartió ayer sesión de trabajo únicamente con el canterano Javi Montoya. El segundo portero albiazul, el joven Álex Sánchez, tuvo que coger el camino de regreso a su casa al presentarse en Ibaia con anginas y placas en la garganta, una dolencia que le obligará también a descansar en la jornada de hoy.

planificación Por otra parte, en las oficinas del club se trabaja a destajo para preparar una próxima semana que va a resultar especialmente complicada al tener que desplazarse el Deportivo Alavés hasta Murcia para afrontar la segunda eliminatoria de la Copa del Rey ante el UCAM Murcia. La idea del cuadro albiazul es partir el martes a mediodía desde el aeropuerto de Loiu hacia Alicante y desde allí desplazarse en autobús a la capital murciana. El miércoles, a falta de confirmar el horario -se estima que se jugará como muy tarde a las 19.00 horas-, el equipo dormiría también en Murcia para emprender el jueves el viaje de retorno.

Tras el regreso de tierras murcianas, el Alavés afrontará la cuarta jornada liguera con un partido de la máxima exigencia ante el Eibar. En un principio, Euskal Telebista tenía previsto retransmitir en directo este partido el sábado por la tarde, pero desde las oficinas del Paseo de Cervantes se ha solicitado que se emita otro partido -tras haber retransmitido dos consecutivos de los albiazules- para así contar con un día más de descanso. Así las cosas, contra el Eibar se jugará el domingo 11 de septiembre a las 18.00 horas.