Vitoria. Mientras observan cómo el resto de jugadores de esta interminable partida juegan con sus cartas, la actual junta directiva del Deportivo Alavés se ha convertido en un convidado de piedra abocado a abandonar la nave albiazul en apenas unos días. Con este fin, el grupo inversor liderado por Josean Querejeta instó ayer a Alfredo Ruiz de Gauna a reabrir por última vez -salvo hecatombe- el proceso de ampliación de capital que viviera sus primeros pasos en diciembre del pasado año. Alrededor de las 12.00 horas de ayer la cúpula directiva que aún trabaja en Mendizorroza recibió la petición del Baskonia para iniciar la tramitación del nuevo plazo de capitalización, cuyo pistoletazo de salida tendrá lugar mañana mismo con su publicación en el BORME. Un proceso que, también a petición del grupo inversor, se prolongará durante una semana para culminar el jueves 30 de junio, aunque se espera que el ingreso de los 2,5 millones de euros necesarios para el trasvase de poderes se acometa antes de dicha fecha.

De esta forma, el dilatadísimo proceso de ampliación de capital en la entidad alavesista tocaría a su fin seis meses después de su inicio con el aterrizaje de los nuevos dueños alavesistas en el Paseo de Cervantes. Ayer, desde la familia Gauna evitaron realizar una valoración más profunda sobre el acuerdo alcanzado para salvar al Alavés a la espera de que todo culmine como está previsto. "Llevamos yéndonos tanto tiempo que no importa esperar un poco más para valorar nuestra etapa en el club", asumió Vanessa Ruiz de Gauna, consejera delegada albiazul, que sí quiso dejar claro que el acuerdo alcanzado en su momento con Josean Querejeta para despedirse de Mendizorroza se mantendrá totalmente intacto. "Mantendremos lo que firmamos en su día y no pondremos ningún problema. Puede que haya alguna pequeña cosa que haya que cambiar, pero nada importante. El cambio se hará lo más ágil que se pueda", explicaron desde la actual junta directiva del Alavés.

Así las cosas, una vez se reabra mañana la ampliación de capital, el colectivo de empresarios liderado por el Baskonia dispondrá de una semana para acometer el desembolso accionarial previsto y tomar las riendas del club de una vez por todas una vez que Caja Vital dé finalmente el ansiado OK a la nueva fórmula para la obtención del crédito. Por lo demás, como bien subrayó ayer su hija, el acuerdo con Alfredo Ruiz de Gauna quedó sellado hace días. El grupo liderado por el máximo dirigente baskonista abonará a su homólogo albiazul en dos plazos anuales de 250.000 euros el medio millón de su aportación a la anterior ampliación de capital reconocidos como deuda del club, además de contar con una opción preferencial para la compra de sus acciones por sesenta euros cada una. Tras largas semanas esperándolo, el apretón de manos final entre Gauna y Querejeta es ya sólo cuestión de días.