"Conseguimos colar la bota de vino porque el vigilante no sabía qué era"

Usted fue uno de los encargados de edulcorar el ambiente en Dortmund con sus pasteles.

Sí, tuvimos que trabajar bastante desde la asociación para tenerlo todo preparado. El Alavés nos pidió pasteles vascos, de arroz y varias cosas más. Tuvimos que encargarnos también de llevarlos al aeropuerto para cargarlos en el avión, así que fuimos de los primeros vitorianos en llegar a Dortmund. Antes de las ocho de la mañana ya estábamos allí listos para ir a la carpa.

¿Muchos aficionados se consolaron a base de chocolate y dulces?

Cada uno expresó su desilusión a su modo. Yo al principio, en cuanto Geli marcó el gol en propia puerta y vi que se acababa todo, me sentí decepcionado y triste. Aunque los días previos no me llegaba a creer que pudiéramos ganar al Liverpool, en cuanto el partido se puso 3-3 pensaba que íbamos a ganar. Lo tuvimos en la mano. Pero bueno, aquel Alavés nos hizo vibrar.

¿Cómo vivió el partido en la grada?

Estaba como en casa, como si fuera Mendizorroza, con mi hijo, con un amigo con el que voy siempre al Alavés, Miguel Ángel San Miguel... Fuimos un poco listos y conseguimos colar la bota de vino, que era difícil con los controles que había.

¿Sobornó al vigilante?

No, la llevaba colgando, pero él se dedicó a mirar de arriba a abajo la mochila y a hablarme en alemán, como si yo le entendiera, mientras yo le miraba todo el rato para ver si no me decía nada de la bota, que la vio pero no sabía lo que era.

Los aficionados de Vitoria dieron un ejemplo de comportamiento.

Demostramos que los seguidores del Alavés somos unos caballeros y, aunque el equipo perdió, todos salimos contentos y orgullosos.

Pasó mucho tiempo en la carpa. ¿Le gustó el ambiente que se creó?

La verdad es que sí. La carpa estaba muy bien. Además, desde primera hora de la mañana ya teníamos a un montón de ingleses con sus jarras de cerveza. No se las bebían, se las tragaban. No sé cuantas personas nos llegamos a reunir allí, pero fue increíble.

¿Se notaron en la ciudad los beneficios de tener un equipo jugando una competición como la UEFA?

Sí. Dortmund es lo que siempre recordaremos, pero también fue bonito y emocionante lo que vivimos antes, como la eliminatoria contra el Inter de Milán. Esos partidos vinieron muy bien a la hostelería y los comercios de Vitoria. La ciudad se movió mucho y también sirvió para traer gente de fuera.

¿Fue duro el regreso a Vitoria?

Durante más de una semana en Vitoria sólo se hablaba de eso. Ahora, una década más tarde, cuando se acercan estas fechas todos los años me acuerdo de lo que pasó.

el cuestionario

l ¿Quién marcó el gol del Liverpool que decidió la prórroga?

Geli.

l El portero del Alavés era...

Herrera.

l ¿De qué color era la camiseta que lució el Alavés en la final?

Era la rosa, color vino con la publicidad de Rioja Alavesa y los nombres de los socios. Aunque la de la final era azul.

l ¿Recuerda quién lucía el brazalete de capitán?

Karmona.

l ¿Y a alguna de las estrellas del Liverpool?

No recuerdo, con los del Alavés tenía bastante. Tenía buenos jugadores el Liverpool

l ¿A quiénes expulsaron?