Vitoria. La fumata blanca todavía no apareció ayer por la chimenea virtual del futuro del Deportivo Alavés, pero el horno se encuentra ya totalmente preparado y a falta únicamente de que se le introduzcan los votos que deben ser quemados para anunciar públicamente la vía libre definitiva al cambio de poder en la entidad del Paseo de Cervantes. De esta manera puede resumirse gráficamente la situación del Glorioso tras los últimos acontecimientos de ayer jueves.
Pese a que estaba previsto que la junta directiva de Caja Vital decidiese ayer conceder el crédito solicitado por Josean Querejeta y su grupo de colaboradores para llevar a cabo su desembarco en el Alavés, finalmente esta decisión fue pospuesta. Una medida que, no obstante, en absoluto significa que se haya complicado el visto bueno a la operación y que ésta corra peligro de no llevarse a cabo.
Simplemente la coincidencia con una jornada de mucha actividad -por la tarde se celebró la asamblea general- en la entidad financiera y la conveniencia de ultimar minuciosamente los detalles finales motivaron el retraso del O.K. definitivo. Una circunstancia que se producirá en breve toda vez que el paso del tiempo se ha convertido en un enemigo de los intereses albiazules (el lunes concluye la tercera fase de la ampliación de capital y el día 14 están fijados los juicios por incumplimiento del convenio).
En cualquier caso, ya obra en poder de Caja Vital toda la documentación necesaria y únicamente resta el trámite de darle curso oficial. Y, lo que es todavía más importante, las principales fuerzas políticas están de acuerdo en que se conceda el crédito y, según han confirmado a este periódico, dan ya por absolutamente cerrada la operación. De esta manera, tanto el PNV como el Partido Socialista y el Partido Popular han consensuado su punto de vista sobre el préstamo y observan esta solución como la única viable para garantizar la viabilidad de la maltrecha institución albiazul.
En consecuencia, en los próximos días adquirirá carácter oficial la aprobación del crédito, lo que supondrá el pistoletazo de salida definitivo a la operación que concluirá con el desembarco de Josean Querejeta y sus colaboradores en las oficinas del Paseo de Cervantes. Una vez asegurada esta importante inyección económica, únicamente restaría ya capitalizar el club en los algo menos de dos millones y medio de euros en títulos que han salido a la venta -lo que les permitirá disponer de la mayoría absoluta- y alcanzar un acuerdo con la familia Ruiz de Gauna para que el traspaso de poderes se produzca de la manera más rápida y eficaz posible.
Silencio oficial Aunque el movimiento en la cocina de las negociaciones está resultando intensísimo durante las últimas semanas, oficialmente el silencio es la nota predominante en todas las partes implicadas. El último ejemplo de ello lo protagonizó en la tarde de ayer el presidente de Caja Vital. Cuestionado públicamente por la implicación de la entidad financiera alavesa en el proceso de salvación del Glorioso, Carlos Zapatero se aferró a la más absoluta discreción para no pronunciarse al respecto.
"El Deportivo Alavés es una mercantil más como lo son otras muchas que pueden tener relaciones con Caja Vital y de la misma manera que no hablamos de ellas tampoco lo vamos a hacer del Alavés. Ni puedo ni debo. No puedo permitirme ese lujo. Sería una ligereza muy grande y un error imperdonable por mi parte hacerlo", argumentó. Pese a la reiteración de las cuestiones en este sentido, Carlos Zapatero no varió lo más mínimo su discurso y la única novedad que aportó fue su deseo de que el club albiazul "consiga el ascenso lo más rápido posible".
En cualquier caso y pese al actual mutismo oficial, la fumata blanca que anunciará la concesión del crédito a Querejeta y su llegada a Mendizorroza comienza a asomar ya por las oficinas de Zurbano.