Vitoria. El discurso de Miguel Ángel Álvarez Tomé ha calado hondo en el seno del vestuario alavesista y los propios jugadores no dudan a la hora de reconocer que las cosas no se han hecho del todo bien en los últimos partidos porque el Alavés ha perdido algunas de sus principales señas de identidad. "El entrenador quiere imprimir su personalidad al equipo. Es intenso y agresivo y quiere que seamos así. De momento nos está saliendo bien y si dejamos de hacer ese tipo de cosas vamos a ir a menos. Hay que seguir con lo que nos ha llevado a ser líderes de este grupo. En la segunda parte de Barakaldo no fuimos así y eso nos costó el empate y casi la derrota", aseguró Jorge Morcillo tras el entrenamiento de ayer.
Fue una sesión en la que Álvarez Tomé se desgañitó para que no se vuelvan a repetir los fallos cometidos en Barakaldo, algo que se asume desde la plantilla: "Es el primer entrenamiento de la semana y no hay que dejar pasar los errores del sábado. Hay que corregir esas cosas que nos hicieron no traernos los tres puntos a Vitoria. Hay que mejorar porque los rivales también ven nuestros partidos y saben dónde hacernos daño".
Porque, como reconoce el propio Morcillo, no se encuentra el Alavés en el mejor momento de la temporada a pesar de que tampoco los rivales directos se estén aprovechando de este desfallecimiento.
"Llevamos dos partidos en los que no nos hemos llevado la victoria, el juego ha empeorado y creo que ahí está esa pequeña crisis de resultados. Pese a ello, seguimos arriba, ningún rival lo que está teniendo fácil y el empate se hizo más o menos bueno por demérito de los demás. Ahora viene un partido muy difícil en casa porque el Palencia está apurando esas últimas opciones de llegar a la cuarta plaza, que parece que es la única que queda en juego", indicó el valenciano.
El central zurdo tiene claro que el incremento de nivel de los rivales, sobre todo los de la parte baja que se juegan la vida, va a propiciar que los equipos cabeceros saquen ahora menos puntos que en la primera vuelta. Por ello, y teniendo en cuenta que físicamente el equipo tampoco se encuentra en el mejor momento, Morcillo aboga por "ser más fuertes que nunca para no perder puntos y que se escape el liderato".