Iván Malón recibió ayer al mediodía el alta hospitalaria después de ser operado el pasado jueves de una fractura en su nariz. El lateral valenciano pasó una mala noche y, pese a que en un principio, se esperaba que pondría abandonar el hospital a primera hora de la mañana no se fue a su domicilio hasta pasadas las dos de la tarde. El defensa albiazul debe guardar ahora dos días de reposo domiciliario ya que se encuentra todavía con muchas molestias y el martes tendrá una revisión.