Vitoria. Primera bola de partido salvada. El Deportivo Alavés podrá continuar disfrutando de las instalaciones de Ibaia como mínimo durante un mes más y, lo que es más importante, ve la luz al final del túnel de su definitiva capitalización. Porque es así como debe interpretarse el aplazamiento de la subasta prevista para las nueve y media de la mañana de hoy tras la intercesión de la Diputación. El Ejecutivo foral, principal impulsor de la búsqueda de nuevos inversores, dio este paso tras tener muy avanzado el acuerdo con los que llevarán el timón de la nave albiazul en el futuro inmediato. El desenlace a una mañana frenética de gestiones a múltiples bandas se produjo al filo de los dos del mediodía. Fue entonces cuando la Tesorería de la Seguridad Social dio el O.K. definitivo a la solicitud recibida minutos antes desde el Palacio de la Provincia. A través de una llamada telefónica, la Diputación pedía que se paralizase el proceso en marcha y que se pospusiese un plazo de tiempo razonable.

El motivo, facilitar que los gestores que asuman las riendas del club puedan conservar el que se ha convertido prácticamente en su único patrimonio y dispongan de un margen para poder renegociar o saldar los poco más de 350.000 euros de deuda con la Seguridad Social.

Se trata por lo tanto y en definitiva de una buena noticia ya que, sean cuales sean los acontecimientos que depare el futuro inmediato, por ahora el Alavés podrá continuar disfrutando de Ibaia. En cualquier caso, el discurrir último de los acontecimientos no deja de resultar, cuando menos, paradójico.

Porque, por un lado, la intercesión de la Diputación se produjo prácticamente sobre la bocina y arriesgándose a que su intento resultara inútil. Y es que si alguien hubiera presentado alguna oferta durante el plazo de dos meses que concluía a los dos del mediodía de ayer, la paralización hubiera resultado completamente imposible al resultar terceros perjudicados. En cualquier caso, el Ejecutivo de Xabier Agirre prefirió aguardar a que se aclarase la situación de los inversores que pretenden tomar las riendas del club y que en los próximos días saldrán a la luz.

Puja desierta Por otro lado, la sucesión de acontecimientos que se habían producido durante todo este tiempo conducía a pensar que el resultado final hubiera sido exactamente el mismo aunque la Diputación no hubiera entrado en escena. El motivo resulta evidente. Los interesados en pujar por Ibaia tenían de plazo hasta las dos de la tarde de ayer para presentar sus ofertas por escrito y en sobre cerrado bajo unas condiciones en las que resultaba suficiente con ofertar el 25% del valor total de tasación para poder quedarse con los terrenos. Es decir, que por poco más de medio millón de euros se podía adquirir unas instalaciones valoradas en 2.097.826,22 euros.

Pues bien, absolutamente nadie se acercó hasta la Tesorería de la Seguridad Social para pujar bajo estas apetecibles circunstancias. Cierto es que todavía hubiera quedado la posibilidad de acudir físicamente en la mañana de hoy a la subasta pero las condiciones de la puja eran bien diferentes. En este caso, el precio mínimo de partida era el 75% de la tasación o, lo que es lo mismo, algo más de millón y medio de euros. Teniendo en cuenta que nadie había entrado a la subasta cuando podía hacerse con los terrenos por una tercera parte de eso, parece lógico pensar que tampoco hoy hubiera aparecido comprador interesado alguno.

En consecuencia, la licitación hubiera quedado desierta y se hubiera abierto un escenario idéntico al actual. O bien se fijaría una nueva fecha para el proceso o se retomaría una negociación entre las partes que pudiese conducir a un acuerdo. En resumidas cuentas, que la manera en la que se ha producido la intercesión de la Diputación parece más un gesto para facilitar la entrada de los nuevos inversores que una medida que realmente modifique el escenario.

A la espera Una imagen que todo apunta a que continuará inalterable al menos hasta que el próximo viernes expire el primer plazo de la ampliación de capital en marcha, en el que los actuales accionistas conservan el derecho de suscripción preferente. Hasta el momento, únicamente se han comprado 133 nuevos títulos y será a partir de la próxima semana cuando los inversores fuertes salgan a la luz y faciliten el nuevo reparto del capital social albiazul.