Vitoria. "Posiblemente no hagamos más fichajes". Así de claro y rotundo se mostró ayer Gorka Etxeberria, director deportivo del Alavés, sobre la posibilidad de que se pueda producir alguna incorporación en este mercado de invierno.
El club tiene clara esa máxima que dice que cuando algo va bien, lo mejor es dejar las cosas como están. "Lo que funciona es mejor no tocarlo. El equipo lo está haciendo bien y posiblemente no hagamos más fichajes", aseguró ayer el responsable de la secretaría técnica albiazul.
La única opción posible para reforzar el Alavés es que en el mercado aparezca una ganga que "mejore lo que hay". "Tendría que surgir una oportunidad. Algo barato y que dé un salto de calidad al bloque, pero no lo sé. Ahora mismo no tenemos necesidad de gastar dinero en balde", añadió al respecto Etxeberria.
Pese a que la intención del club es la de no tocar nada, el director deportivo quiere dejar claro que su equipo de trabajo "está activo" y "sigue rastreando el mercado por si pudiera aparecer un futbolista interesante". En ese sentido, quiso dejar claro que en la secretaría técnica del club tampoco se van a "volver locos", ya que Etxeberria entiende que con lo que hay el Alavés puede seguir haciendo el gran papel que ha realizado hasta la fecha.
Además, para que se produzca una entrada es necesario que se dé también una salida, opción ésta que el responsable deportivo del Alavés ve muy complicada, tanto en aquellos jugadores que están causando sensación y pudieran ser pretendidos por otros equipos, caso de Casares, o de los que no han actuado ni un minuto, como por ejemplo Guereñu. "No hay ofertas por los que están gustando y haciéndolo bien y tampoco nos han llamado preguntando por los que no juegan", explicó.
De momento, los esfuerzos del club están centrados en decidir quien será el acompañante de Montero en la portería, bien el recién llegado Lasse Staw, el joven Montoya u otro. El Alavés decidirá esta semana si finalmente se queda con el guardameta noruego que llegó el domingo a Vitoria y estará toda esta semana a prueba o ficha a otro tras la cesión de Reguero al Ontinyent. "Para el viernes tenemos que tomar una decisión. Ahora lo que tenemos que ver es si este portero nos encaja o habría que buscar otro".
CONFIANZA EN MONTOYA En el caso de que finalmente el meta nórdico no sea del agrado de la entidad babazorra, ésta confía plenamente en el joven Montoya para que esté en el banquillo el sábado en Anoeta ante la Real B. "Con el nivel que tiene Montoya se ha ganado la confianza del entrenador y del entrenador de porteros, lo que nos permite apostar por él una o dos semanas hasta que se fiche a otro, aunque también podría ser el definitivo", concluyó Etxeberria.