Vitoria. Una de las noticias que más tiempo llevaba esperando el alavesismo por fin se convirtió en realidad en la jornada de ayer. Después de tres años de distanciamiento absoluto, Deportivo Alavés y Diputación foral de Álava volvieron a encontrar un punto de unión. De esta manera, el consejo de diputados aprobó un nuevo convenio de colaboración entre ambas entidades por importe de 750.000 euros que, pese a no traducirse en ingresos efectivos en las cuentas albiazules, permite a la entidad del Paseo de Cervantes prácticamente saldar la deuda fiscal que arrastraba con la Hacienda pública y que se había ido acumulando tras acogerse El Glorioso a la Ley Concursal.

Este primer paso hacia la normalización -que según el portavoz foral llega "con vocación de continuidad" (en los presupuestos de 2011 ya hay reservada una cantidad idéntica para esta misma partida)- supone recuperar un acuerdo tradicional y que llevaba roto desde que, en 2006, los desmanes de Dmitry Piterman al frente de la entidad llevasen a las Juntas Generales a aprobar por unanimidad la suspensión del mismo. Sin embargo, la salida del ucraniano del despacho presidencial no supuso ni mucho menos la inmediata recuperación del convenio.

Ni Fernando Ortiz de Zárate primero ni Alfredo Ruiz de Gauna -en los meses precedentes- habían sido capaces hasta ahora de convencer al Ejecutivo de Xabier Agirre. Hace unos meses, las Juntas aprobaron recuperar este acuerdo -que ha estado sin efecto (con el consiguiente perjuicio económico para el Alavés) durante los ejercicios 2007, 2008 y 2009- por un importe de 500.000 euros ampliable hasta los 750.000. No obstante, la rúbrica del mismo no terminaba de producirse y las cada vez más tensas relaciones entre el consejo de administración albiazul y los rectores del Palacio de la Provincia llegaron a poner en serio peligro la firma del mismo. Sin embargo, tras la reunión que mantuvieron ambas partes la semana pasada, la situación experimentó un inesperado giro favorable que culminó ayer con la decisión del consejo de diputados.

Una medida que, además, supone destinar al Deportivo Alavés la mayor cuantía posible para la presente temporada 2010-11. Con esos 750.000 euros y según confirmó el propio Claudio Rodríguez al anunciar públicamente el acuerdo, la deuda fiscal de la entidad del Paseo de Cervantes "queda prácticamente saldada". En realidad, quedarían pendientes aproximadamente otros 150.000 euros pero, si prospera esta incipiente y renovada buena sintonía, todo indica que no se convertirán en ningún problema. "La Diputación no va a perdonar al Alavés deuda alguna, como tampoco lo hace con otras empresas, pero desde luego a lo que sí está abierta es a profundizar en esta relación para tratar de llegar a acuerdos de futuro".

Izarra, todavía no La recuperación del convenio de colaboración supone sin duda un hito muy importante para el club vitoriano, pero su futuro continúa estando seriamente amenazado y aún conserva temas muy importantes por resolver. En uno de ellos también tiene como compañera de baile a la Diputación y, de momento, va a continuar sin resolverse definitivamente. Se trata de la compra de los terrenos de Izarra por parte del Ejecutivo foral como pago en especie de los más de cinco millones de euros de deuda pendiente tras la aprobación del convenio de acreedores. La luz verde a este asunto, aún tendrá que esperar.

Al menos, hasta que se complete con éxito la ampliación de capital por valor de 2,5 millones de euros que, salvo sorpresa mayúscula, se aprobará en la próxima junta extraordinaria de accionistas. "Nosotros hemos dejado muy claro desde el principio nuestro apoyo a la viabilidad del club y lo hemos demostrado con creces con una aportación global superior a los siete millones de euros pero lo que no podemos hacer es pillarnos las manos con decisiones que después nos hagan tener que devolver nosotros el dinero. Mantenemos la propuesta y se hará efectiva en cuanto el Alavés haya cubierto la imprescindible capitalización que necesita", desgranó Claudio Rodríguez.

El desembolso por parte de la Diputación de los 750.000 euros de que consta el convenio va ligado a una serie de contraprestaciones que, como es lógico, debe llevar a cabo el club albiazul. Entre ellas destaca la promoción del fútbol base (para ello El Glorioso deberá firmar acuerdos con un mínimo de diez equipos o clubes de fútbol de la provincia)y del territorio histórico. De la misma manera, los dos primeros conjuntos de la entidad del Paseo de Cervantes -en estos momentos el de Segunda B y el de Preferente- lucirán publicidad foral en la parte posterior de la camiseta. Todo ello permanecerá vigente hasta la conclusión de la presente temporada -la intención es que se pueda ir prorrogando ejercicio a ejercicio- y estará sometido a una comisión de seguimiento.

Txarli Prieto En cualquier caso, la rúbrica del convenio no supone ni mucho menos la solución a todos los males que amenazan de muerte el futuro del Alavés. El peligro de desaparición continúa siendo evidente salvo que se produzca de inmediato una importante entrada de dinero en las arcas del club que permita su capitalización. En este sentido, el secretario general del Partido Socialista de Álava, Txarli Prieto, se mostró ayer, en declaraciones a Radio Vitoria muy optimista respecto a la inminente aparición de una solución que garantice la supervivencia del Deportivo Alavés. "Estamos trabajando intensamente en la búsqueda de personas que puedan capitalizar el club para asegurar su futuro lejos de los problemas de ahora y creo que en breve puede haber buenas noticias", vaticinó.

A este respecto, el teniente de diputado general, Claudio Rodríguez, aseguró "desconocer" cualquier información al respecto. En cualquier caso, se congratuló de que pudieran llegar a concretarse estos movimientos que conduzcan a que la entidad del Paseo de Cervantes consiga la "imprescindible capitalización". Por último, advirtió de que la Diputación "ni quita ni pone presidencias".