¿Cómo le convencieron para embarcarse en esta aventura?
En principio, la familia Ruiz de Gauna ha sido cliente nuestro durante muchos años y siempre hemos tenido una buena relación, incluso de amistad. Cuando empezaron con el tema del Alavés objetivamente les dijimos que la situación era muy precaria para intentar gestionar eso como una empresa. Lo que pasa es que a ellos, más que la visión empresarial, les ha podido el corazón. Una vez que ya entran definitivamente, decidimos echarles una mano dentro de nuestras posibilidades. Y nuestras posibilidades son sobre todo profesionales porque económicamente no somos empresarios. Se trata de echar una mano hasta el final en todos los sentidos. ¿Cómo nos convencieron? Al final cuando ves a alguien con el que tienes mucha relación metido en un problema, y más nosotros como abogados, lo que intentas es que sea cada vez menor y tratar de solucionar las cuestiones.
¿Por lo tanto estar ahora mismo al frente del Alavés es mucho más un problema que un negocio o una oportunidad?
Sí, sí, sí, sin duda. El Alavés es un problema. Como inversión, yo creo que hoy en día es la peor que existe en Vitoria y en Álava. Si hay gente que se ha involucrado en el asunto es ya por otros temas, por sentimiento y corazón fundamentalmente. Y lo que se trata es de intentar salvar la situación de la mejor manera posible, porque el Alavés iba abocado a la liquidación, eso lo tengo clarísimo. Lo que hemos visto durante estas dos o tres semanas es que las cosas dentro están cambiando, se ve otro tipo de gestión. Hay una economía que hay que hacerla de mínimos, mínimos, mínimos. Te lo dicen los propios empleados: "ahora no se gasta en esto, ni en esto ni en lo otro".
¿Entiende que el hecho de que la identidad del tercer socio no se conociese inicialmente creara cierta inquietud teniendo en cuenta los precedentes?
Sí, pero no desvelar quién era el tercer socio no se hizo con ningún ánimo de querer ocultar nada, simplemente fue con la intención de informar primero a las instituciones y porque tampoco teníamos especial interés en figurar públicamente. Desde el segundo día se informó a la Diputación de quién era el tercer socio, se pusieron las cartas sobre la mesa y mantuvimos una reunión en la que explicamos todas las circunstancias. Y ahora se está preparando toda la documentación para llevarla a la Diputación y que vean cuál es la situación real, accionarial, todo lo que se ha hecho en la ampliación de capital y lo que se pretende hacer con la viabilidad del club en el futuro. Tanto la viabilidad de este año -que yo creo que dentro de lo complicado que está se puede salvar-, como la del que viene, que va a ser lo más importante. Ojalá estemos hablando de Segunda, pero incluso así es difícil. Lo que se va a plantear es un plan de viabilidad a muy corto plazo, que es esta temporada, con todos los números para que la Diputación vea que el proyecto es viable, y a medio plazo que ya es para la próxima campaña. Se irá haciendo así para cada temporada porque si planteas a largo plazo al final te acabas gastando todo antes de un año.
¿La ampliación de capital que se ha suscrito hasta ahora se ha realizado con el método de dinero por acciones o se ha empleado también la fórmula con la que trabajan de cara al futuro de intercambiar deuda o servicios por títulos del club?
Gran parte se ha hecho mediante dinero efectivo. Otra, y resulta un poco discutible, se ha hecho con cambio por prestación de servicios. Habrá que ver si esa fórmula es admitida luego en el registro pero la mayoría se ha hecho con dinero. En cualquier caso, todas esas circunstancias se han explicado y se van a explicar con pelos y señales a la Diputación. Aquí nadie quiere ocultar nada. La transparencia va a ser total y absoluta, lo que pasa es que al que primero hay que explicar la situación es a los que tienen que aprobar ese convenio.
¿De cara al futuro sería necesario abrir una nueva ampliación de capital para poder emplear esta fórmula de compensación de créditos o servicios con acciones?
De acuerdo con los planes de viabilidad que se están barajando yo creo que sí. Con la ampliación de capital y con la financiación que se pretende se puede salvar económicamente el club en la situación actual. A medio plazo, habrá que ampliar y se está hablando con profesionales de todo tipo para hacerlo así. Además la sintonía de la mayoría de la gente es muy buena, incluso de los acreedores. Hay que tener en cuenta que en el territorio hay muchísima gente del Alavés, bien sean aficionados, socios o accionistas. Se trata un poco de remar todos en el mismo sentido y llevar el club hacia delante. Lo que no hay que hacer es entrar y cobrar, porque no se puede. Y hasta ahora yo creo que se ha hecho así y es el gran error, porque se ha tenido una economía que no es la que corresponde a la situación.
¿Se ha vivido por encima de las posibilidades del club?
Sí, sí, se ha vivido muy por encima de las posibilidades, yo creo que sí.
¿Incluso hasta muy recientemente?
Sí.
¿La hipotética futura ampliación de capital de la que hablamos debería llevar un proceso similar a la que ha concluido?
Sí, habría que aprobarlo en asamblea y realizar la suscripción de las nuevas acciones de acuerdo al tope que se haya previsto.
Esa situación podría poner en riesgo la actual mayoría accionarial.
Sí, evidentemente. Pero yo lo tengo clarísimo, lo que importa es la viabilidad del club. Si la mayoría accionarial en vez de tres personas o cinco tienen que ser veinte, es lo mismo, lo que importa es la viabilidad. No se va a impedir ni se ha impedido nunca la entrada de nuevos socios en el Deportivo Alavés. Si quiere venir alguien, poner dinero y tener una mayoría sustancial, colaborará en el sentido y con la idea que hay, que es la economía y las circunstancias que tenemos. Sería hasta bueno. Lo importante es que haya capital y que las personas que entren quieran al club y apuesten por una buena gestión.
¿Se planteará esta propuesta a las instituciones respecto a su deuda?
El planteamiento se va a hacer, lo que ocurre es que no sé cuál puede ser su respuesta. Nosotros estaríamos encantados de que las instituciones entraran incluso en el consejo de administración del Alavés, o que pusieran a alguna persona de su confianza controlando el día a día. Sin ningún problema. Lo que se trata es de hacer todo lo más transparente posible. Otra cosa es que quieran hacerlo o no pero desde aquí se les abren las puertas del club a esas circunstancias y a otras. De hecho en la primera reunión con la Diputación se le planteó. Porque no se trata de ocultar sino de que todo vaya lo mejor posible.
¿Cómo definiría en estos momentos la relación con las instituciones?
Muy buena, muy buena. Yo entiendo perfectamente que Diputación exija lo que está exigiendo, me parece loable y lógico porque es el dinero de todos. Lo que no es lógico a mi modo de ver es que los que estaban hace años no hicieran lo mismo con todos los anteriores. Y la relación con el Ayuntamiento es también estupenda.
¿Puede estar cerca el momento en el que se lleguen a acuerdos que repercutan ya en algo material para el club?
Esperemos que sí. Desde el club se está preparando toda la documentación y se va a entregar con una transparencia absoluta. Con lo que está sobre la mesa tenemos este plan de viabilidad a corto plazo y este otro a medio. Si la Diputación está de acuerdo, perfecto. Si no, hablaríamos de otras circunstancias, pero todo va a estar muy claro.
¿En estos momentos hay liquidez para hacer frente al día a día?
Sí, se están haciendo los pagos a los jugadores, los que hay que hacer del procedimiento concursal...