Vitoria. Las mejores noticias de la semana para el Deportivo Alavés han llegado desde una enfermería que, a excepción de un Iker Guereñu que todavía tiene un largo período de convalecencia por delante, se ha quedado vacía.

A principios de semana fue Diego Segura quien se reincorporó con absoluta normalidad al trabajo con el grupo después de haber superado los problemas que arrastraba en la rodilla y las noticias positivas se completaron ayer con la reintegración al trabajo con el grupo de Cristian Castells y Dani Bouzas.

Ambos jugadores se pusieron a las órdenes de Javier Pereira en una sesión de trabajo que se desarrolló a puerta cerrada y en la que los recién recuperados se ejercitaron con ciertas precauciones. El técnico albiazul los vio a un buen nivel, aunque no quiso lanzar las campanas al vuelo y prefiere esperar a la sesión de trabajo matinal de hoy para tomar una decisión definitiva acerca de si alguno de los dos va a poder estar disponible de cara al partido de mañana.

Si físicamente se encuentran plenamente recuperados, Pereira podría optar por dar entrada a los dos jugadores, ya que tanto Castells como Bouzas han sido piezas fundamentales en el equipo a lo largo de la presente temporada y sus ausencias, sobre todo la del primero, han sido bastante complicadas de cubrir.

Eso sí, y a pesar de haber mucho en juego en el choque contra la Ponferradina, lo que el técnico albiazul no va a hacer es jugar con fuego, ya que quiere evitar cualquier tipo de complicación añadida que suponga una recaída y una baja por lesión aún más prolongada.