BERLÍN. La Audiencia Provincial de Bayreuth ha concluido, al igual que la acusación, que el camionero, Boujemaa L., de 42 años, golpeó y dejó malherida a la joven, Sophia Lösche, de 28 años, en el transcurso de una pelea y la acabó matando en una segunda agresión, han informado medios locales.
Por ello, para el tribunal se trata de un asesinato con el fin de ocultar las lesiones físicas previas.
La joven se subió en la tarde del 14 de junio de 2018 en el camión del Boujemaa L. en una gasolinera en la ciudad sajona de Schkeuditz con la intención de viajar hasta Núremberg, desde donde quería continuar hasta Amberg, a unos 65 kilómetros, según explicó su hermano, para visitar a la familia, pero nunca llegó.
El cuerpo de Sophia fue hallado una semana más tarde, el 21 de junio, en una cuneta en Asparrena.
El camionero había sido detenido un día antes en Jaén por la Guardia Civil en cumplimiento de una orden europea de detención y entrega cursada por Alemania.
La acusación sostenía que el camionero mató a la joven para ocultar un delito sexual, pero los forenses no hallaron indicios de una agresión de estas características, por lo que la fiscal renunció a aludir a esta posibilidad en su alegato.
La fiscal había exigido cadena perpetua por asesinato y lesiones graves, mientras que la defensa, que argumentó que la joven ya estaba muerta después del primer golpe, solicitó para el camionero una condena por homicidio con una pena de varios años de prisión.
