maeztu - El lehendakari, Iñigo Urkullu, junto a sus consejeros de Gobernanza pública, Josu Erkoreka, e Infraestructuras, Arantxa Tapia, y el diputado general de Álava, Ramiro González, acudieron ayer a la localidad de Maeztu para dar a conocer los resultados del proyecto de extensión de redes de banda ancha ultra rápida en Euskadi. Previamente a la llegada de las autoridades se facilitó información sobre el punto de partida que existía en el País Vasco hace poco más de cuatro años y el momento actual. Según el diagnóstico realizado en 2015, en Euskadi existen más de 900 polígonos empresariales, cuya variedad en tamaño es muy amplia. Se constató que casi el 50% de los polígonos identificados podría clasificarse como zonas blancas NGA2, tratándose tanto de polígonos empresariales con más de 250 empresas, como de pequeñas áreas en las que se hallaba ubicada una sola empresa industrial, pero con alto contenido tecnológico y necesidades de conectividad a otras empresas del grupo. A esto se añadía que existían más de 600 núcleos en zonas blancas que aglutinaban a más 90.000 habitantes. De estos, solamente 16 núcleos superaban los 1.000 habitantes y 600 de ellos no alcanzaban los 500. En todos ellos la situación de conectividad era claramente deficiente.
En cuanto a previsiones de crecimiento, se constató que los operadores de telecomunicaciones no prestaban servicios de conectividad NGA ni tenían interés en prestarlos en numerosos polígonos empresariales y unidades poblacionales por falta de rentabilidad económica y complejidad técnica para los despliegues tanto de redes troncales como de acceso. Ante ello se consideró necesario abordar planes de actuación que incentivarán los despliegues (PEBA) para mantener la competitividad de las empresas (estrategia Basque Industry 4.0) y para asegurar un equilibrio territorial en la calidad de vida en zonas urbanas y rurales. Y es que, el volumen del problema que se identificaba era de tal magnitud que serían necesarios varios planes de extensión de banda ancha (PEBA) coordinados, que incentivarán los despliegues, en la línea de los que el Ministerio venía lanzando desde 2013 en el Estado con nulo impacto en Euskadi hasta ese momento. De esta manera se elaboraron planes de extensión de banda ancha (PEBA) en los años 2016 a 2019, cuyos frutos han sido la cobertura de banda ancha ultra rápida en un 99% a las empresas de Álava, un 98% a las de Bizkaia y el 99% en Gipuzkoa, tanto para las que ya lo tienen o están esperando el despliegue a corto plazo. Asimismo, a la espera de cerrar el ejercicio 2019, en los dos años anteriores se dotó de esta banda ancha a 465 localidades en Álava.
El lehendakari realizó unas declaraciones en el exterior del edificio de usos múltiples de la localidad, donde anunció que la universalización de la cobertura del servicio de banda ancha para prácticamente todo Euskadi está prevista para finales del próximo año 2020. “Gracias al esfuerzo compartido, Euskadi se encuentra en el grupo líder del Estado en porcentaje de hogares con cobertura de banda ancha ultra rápida”, precisó. Recordó que el plan se puso en marcha el año 2015 para incentivar su despliegue en polígonos empresariales y, además, mejorar la conectividad de más de 600 poblaciones. Añadió que en el periodo 2016-2018, el Gobierno Vasco y las tres diputaciones otorgaron ayudas por un importe cercano a los 10 millones de euros.
Araba Konektada. La Diputacion alavesa puso en marcha este programa enfocado a 166 núcleos de población en la denominada zona blanca y con ayudas de hasta el 90% para facilitar la llegada de la banda ancha. Destinó para ello un total de 2,42 millones de euros para el despliegue combinado de servicios de fibra óptica en 52 núcleos con ancho de banda mayor de 100Mbps y 114 núcleos con ancho de banda de 30Mbps bajo soluciones inalámbricas LTE-E, como establece la UE.