LAGUARDIA - La firma Azucarera ha puesto en evidencia lo que considera una magnífica evolución del cultivo este año en la zona norte, tras analizar las muestras que se han tomado durante la última semana. Los resultados de la muestra de precampaña, de finales de agosto, ya están por encima de los primeros resultados obtenidos la campaña pasada a finales de septiembre. Esto es resultado principalmente de dos cosas. Por un lado, se debe a las condiciones climáticas favorables que se han dado hasta el momento y por otro lado y muy importante, el esfuerzo de los agricultores y técnicos para tomar las mejores decisiones agronómicas en cada parcela. En palabras de Salomé Santos, directora del área agrícola de Azucarera, “estos datos son muy prometedores y nos permiten afrontar la preparación de la nueva campaña con mucha ilusión. Estamos valorando internamente la fecha óptima de apertura de las tres fábricas de Castilla y León, para que la remolacha sea entregada en condiciones óptimas de rendimiento y sin tiempos de permanencia en el montón que perjudiquen al agricultor.” En este sentido, con el fin de adaptar la apertura de todas las fábricas, desde Azucarera se está intensificando la labor de asesoramiento de los equipos técnicos con los agricultores para comenzar los planes de arranque en los momentos óptimos de rendimiento del cultivo.

reducción de la materia prima Por otro lado, la tendencia alcista del precio del azúcar se sigue manteniendo, debido a la caída de las previsiones de producción para la campaña 19-20 en Europa debido a una reducción de la superficie cultivada de remolacha de en torno al 5% y a las dudas sobre los rendimientos finales como consecuencia de una meteorología adversa. Esto provocará previsiblemente un incremento del 30% en el precio del azúcar con respecto a la campaña 2018-19. Todo esto pone de manifiesto que Azucarera estará en disposición de anticipar parte del complemento vinculado a la evolución del precio del azúcar, que se aplicará sobre el precio base de 26 euros por tonelada. A dicho precio base, hay que añadir las ayudas, que este año estarán en torno a los 10 euros por tonelada equivalente. En definitiva, de cara a la próxima campaña, la rentabilidad del cultivo podría estar próxima a la del año pasado, debido tres factores: los rendimientos que se esperan para esta campaña son sensiblemente superiores a los del año pasado, el precio del azúcar está subiendo y por lo tanto se va a anticipar un complemento aplicable sobre el precio base y las ayudas serán superiores a las del año pasado. La directora del área agrícola de Azucarera alude a cómo “teniendo en cuenta todos estos factores, nuestra estimación es que el ingreso total de nuestros agricultores podría rondar los 3900 euros por hectárea de media”.

La tendencia alcista del azúcar no se ve reflejada en los precios que publica la Comisión Europea porque se trata de un dato que refleja la contratación de la pasada campaña y no recoge la evolución del mercado libre. Azucarera prevé una buena campaña remolachera 2019/2020 en la zona norte.