más allá del primer choque de la legislatura entre las formaciones que seguirán controlando el gobierno foral (PNV-PSE) y las izquierdas a cuenta de la composición de la mesa de las Juntas, donde Elkarrekin Araba no tendrá representación, la jornada de ayer estuvo marcada por la cordialidad entre procuradores de todo signo político, por escenas que casan poco con los vetos que, desde arriba, siguen imponiendo los partidos estos días.

La sesión constitutiva de la Cámara foral arrancó algo más tarde de las 12.00 horas, como estaba previsto, entre la ruidosa protesta de los trabajadores de la factoría Valvospain de Amurrio, donde acaba de presentarse un ERE de extinción para 61 profesionales, alrededor de la mitad de la plantilla. Un primer ejemplo gráfico de que el trabajo no va a faltar durante los próximos cuatro años entre las paredes del Palacio de la Provincia.

Los 51 representantes que integrarán el Pleno de esta undécima legislatura -a expensas de la composición del próximo ejecutivo- accedieron al que será el salón más femenino de la historia de las Juntas -29 mujeres- por orden de acreditación, empezando por EH Bildu y concluyendo por los socialistas. La mesa saliente, donde Elena López de Lacalle (EH Bildu), Julia Liberal (PSE) y Asela Ortiz de Murua (Podemos) no repetirán en la Cámara, posó para la foto de rigor mientras los corrillos se sucedían en el hall de entrada y dejaban animadas conversaciones y calurosos saludos. Entre las invitadas, Iratxe López de Aberasturi o Estíbaliz Canto, concejalas que repetirán en el Ayuntamiento de Vitoria.

El diputado general en funciones, Ramiro González, accedió al palacio a las 11.52 horas acompañado por quien ha sido su mano derecha en la pasada legislatura, Pilar García de Salazar, y tuvo tiempo para departir con los portavoces de todas las formaciones. Entre breves conversaciones con José Damián García-Moreno (Elkarrekin Araba), Kike Fernández de Pinedo (EH Bildu) o Iñaki Oyarzábal (PP), quien seguirá al frente del gobierno foral escenificó también su excelente sintonía con la diputada socialista en funciones Cristina González. Mientras tanto, la expectación y la ilusión se veían reflejadas en muchos de los rostros de los 22 procuradores que se estrenan.

La mesa de edad formada por las jeltzales Joana Egiluz e Izaskun Moyua, que abrió la sesión con un discurso marcadamente feminista, dio inicio a unas votaciones que volvieron a dejar como presidente de la Cámara a Pedro Elosegi, que tiró de clásicos de la poesía y apeló al “esfuerzo, el trabajo y la voluntad de diálogo” de los junteros. Punto final a una sesión a la que siguieron las fotos de familia y a la que seguirá, en adelante, la verdadera contienda política.