elciego vivió ayer un día grande, con sus calles llenas de un buen número de gigantes y grupos de gaiteros que hicieron bailar a los vecinos entusiasmando a pequeños y mayores. Se trataba de los gigantes Ondalan, de Deusto, acompañados por Bizkaiko Gaiteroak, que acudieron a la localidad riojanoalavesa para vivir una jornada de hermandad con los Gaiteros de Elciego, mostrar sus enormes creaciones de cartón piedra y hace disfrutar a los más pequeños, con los que hacen escuela.

Y para mostrar la vitalidad de esta comparsa creada en 1996, Ondalan vino con todos los personajes: el alkatea, txakolinaria, esne saltzailea, pelotaria y otros, acompañados por los que pueden manejar los txikis de la entidad: txistularia, dantzaria, albokaria y gaiteroa, hasta conformar así una larga comitiva que se enriqueció en todo momento con los niños y no tan niños de la localidad.

La actividad comenzó a las 11.00 horas con una kalejira desde el polideportivo a la plaza y allí, a los sones de la gaita los gigantes danzaron y giraron. Tras ello hubo una serie de talleres para que los interesados pudieran ver cómo se construyen estas figuras, una actividad que está en alza ya que son numerosos los pueblos que las están recuperando para disfrutarlos en sus fiestas.

Como aperitivo se volvió a recorrer las calles, de bar en bar, para el disfrute de los numerosos parroquianos que en esos momentos llenaban las calles de Elciego y, de regreso a la plaza, se llevó a cabo el último vals y polonesa antes de comer.

A última hora de la tarde, ya solo con los Bizkaiko Gaiteroak y los Gaiteros de Elciego, hubo música y danzas en la plaza y todo concluyó con un pintxopote amenizado con el sonido de las gaitas riojanoalavesas y vizcaínas.