vitoria - La Fiscalía de Álava pide siete años de prisión para un hombre acusado de maltratar, agredir y vejar a su pareja desde que ella tenía 15 años hasta los 18, un tiempo en el que amagó incluso con tirar por la ventana a la hija de ambos durante una discusión.

La calificación fiscal señala que la pareja convivió durante un corto periodo de tiempo en el domicilio de la madre del acusado y que desde que comenzó la relación éste se mostró celoso y empleó la violencia para imponer su voluntad. Eran habituales “las agresiones que se prolongaban durante horas” contra la joven y que consistían en empujones, tortazos, patadas, tirones de pelo e incluso golpes con objetos como un cinturón y una muleta, señala el escrito de la fiscal. Tras estas palizas, la víctima no acudía a ningún centro médico por temor a la posible reacción de su novio o bien mentía sobre el origen de sus heridas.

Además, el acusado censuraba y controlaba la ropa que ella se ponía, no le dejaba salir sola ni relacionarse con gente y criticaba a su familia y amigos, lo que provocó su aislamiento. También eran habituales los insultos como “hija de puta” y “asquerosa”, que continuaron tras el cese de la relación y otros como “muérete lentamente”, “desearás no haberme conocido” y “te voy a matar”.

En una ocasión, cuando se encontraban en la vivienda de la madre del acusado, tras una pelea, ella se encerró en el baño para evitar ser agredida, pero se vio forzada a salir porque su pareja amagó con tirar a la hija de ambos por la ventana y lo encontró en el balcón con la menor en brazos. La fiscal detalla otros episodios como cuando en junio de 2016 le golpeó en el labio y ella acudió al médico, pero dijo que se había caído.

corte con una botella Otro en agosto de ese mismo año cuando él le escupió en la cara y después le causó un corte con una botella en el cuello, pero no fue a ningún centro sanitario, y cuando en septiembre le envió grabaciones con frases como “mire cómo nació usted, bien puta y bien maldadosa y asquerosa”, “mal parida”, comeguarros” y “que te folle un burro”. A consecuencia de estos hechos, la víctima presenta una afectación psicológica, por lo que la Fiscalía cree necesario que sea sometida a un tratamiento especializado.

Para el acusado, pide siete años de prisión y más de 16 de alejamiento de la víctima por un delito de maltrato habitual, otro continuado de amenazas, otro de amenazas con la agravante mixta de parentesco, un cuarto de agresión y un quinto continuado de vejaciones. El juicio por estos hechos se celebrará la próxima semana en un juzgado de Vitoria. - A.B./Efe