vitoria - La Fiscalía de Álava ha pedido un año de cárcel para dos personas acusadas de tener nueve perros y cinco caballos en situación de abandono, sin agua ni comida a su alcance en unas parcelas en Labastida. El escrito de acusación del ministerio público afirma que ambos acusados dejaron de prestar atención veterinaria y alimento a los animales de forma consciente en una fecha anterior al 3 marzo de 2017. La Fiscalía añade que los Miñones y los técnicos de la Diputación de Álava localizaron en concreto en varias parcelas nueve perros de distintas razas (stanford, alemán y mestizo de galgo) en condiciones deplorables de higiene. Relata que todos ellos estaban encadenados, algunos además estaban encerrados en chabolas y tres presentaban lesiones y heridas. También localizaron dos yeguas y tres potros en condiciones inaceptables y con síntomas de padecer hambre, que tampoco tenían comida ni agua a su alcance. Para el ministerio público, estos hechos son constitutivos de un delito continuado de maltrato animal en comisión por omisión y pide un año de cárcel para los dos acusados e inhabilitación para ejercer una profesión y comercio que tenga relación con los animales, así como para la tenencia de estos durante tres años. Si no se estima probado el maltrato animal, la Fiscalía considera de manera subsidiaria que se podría estar ante un delito continuado de abandono de animal y pide una multa de 1.800 euros para cada uno de los dos acusados así como la inhabilitación durante un año para tener animales y ejercer una profesión y comercio vinculados con éstos. El juicio por estos hechos tendrá lugar en un juzgado de Vitoria la próxima semana.

Agresión sexual La Fiscalía de Álava pide nueve años de cárcel para un hombre acusado de agredir sexualmente a una mujer en el baño de una discoteca de Vitoria. El escrito de acusación del ministerio público relata que los hechos tuvieron lugar en la madrugada del 19 de febrero de 2017 cuando la mujer accedió de manera voluntaria al baño del establecimiento con el acusado y ambos mantuvieron relaciones sexuales consentidas.

Sin embargo, en un momento determinado, el procesado agarró a la mujer “fuertemente” de los brazos y la aprisionó contra la pared del baño impidiendo que se moviera, para a continuación, y sin su consentimiento, penetrarla por vía anal hasta en cuatro ocasiones. La Fiscalía afirma que la mujer mostró resistencia y que incluso exteriorizó su negativa a mantener ese tipo de relaciones sexuales. A consecuencia de estos hechos, la mujer sufrió diversas lesiones y un juzgado acordó una serie de medidas de alejamiento para el acusado. - Efe/DNA