Vitoria - El conflicto por el cierre de los rocódromos se recrudeció ayer en el Consistorio de Vitoria durante la comisión de Deportes en la que el grupo de montaña Neskatzaileak había solicitado el turno popular para pedir explicaciones a la edil del ramo, Estíbaliz Canto, por los cuatro meses en los que estas instalaciones municipales llevan cerradas, motivo por el que también a esa misma hora del mediodía, la plataforma de usuarios Gasteizko eskalatzaileak sutan se concentró en la Plaza Nueva bajo el lema ¿Hasta cuándo? Abrid rocódromos.
Por tanto, la única solución que queda al respecto es la de esperar a que este mismo mes se resuelva la doble impugnación que sindicatos y plantilla han hecho del último pliego de condiciones para la adjudicación del contrato, al no estar de acuerdo ni con la división en lotes de la gestión ni con lo que concierne a la subrogación de la plantilla. Hasta entonces, el gobierno municipal (PNV-PSE), que en esta cuestión cuenta con el apoyo del PP, adelantó ayer que va a esperar a que se resuelvan estos recursos para sacar una nueva fórmula que, aunque todavía no sabe, “puede ser un negociado sin publicidad o sacar un nuevo pliego”, como detalló Canto.
No en vano, la comisión de ayer evidenció lo mucho que se ha elevado el tono entre las partes, tras las tres veces que su licitación ha quedado desierta. Un duro cruce de acusaciones que empezó nada más arrancar ese turno popular, cuando Jaime Otxoa de Alda, trabajador de los rocódromos que a día 7 de enero todavía está en el paro, recriminó que “los trabajadores y usuarios no tenemos que ser los perjudicados de esa falta en la coherencia y gestión por parte del Ayuntamiento para buscar un modelo adecuado, como ha quedado reflejado”.
Lo mismo hizo Julio Sánchez, abogado del sindicato ESK, quien denunció que “tras mucho haberse leído el pliego”, seguía sin entender el aumento del precio por hora, porque no les han explicado las “premisas básicas”. Por ello, incidió que comparecía de nuevo “preocupado por el interés de la plantilla, nunca del interés empresarial” y que, en todo caso, “el cliente no es el Ayuntamiento, sino la ciudadanía, que es la que quiere los rocódromos abiertos y con un buen servicio”.
La réplica por parte de la edil de Deportes tampoco tuvo miramientos al afirmar que “en estos tres últimos años nunca había visto tal manipulación y demagogia como en esta cuestión”. Motivo por el que Canto aseguró que le “parecía un insulto y una soberbia terrible” que una empresa sea la que presione con sus condiciones al Ayuntamiento, “además de que los partidos de izquierda entren también en este juego”.
En este sentido, Canto también fue contundente al declarar que la Administración “no ha errado en esta cuestión”, por lo que no sabía si los que la criticaban vivían “en una realidad paralela que se nos escapa”, puesto que el Ayuntamiento ha ido aumentando tanto el precio por hora como el número total de horas del servicio pliego a pliego.
Su socio de gobierno, el jeltzale Iñaki Prusilla, también fue claro al destacar que “el cliente es el Ayuntamiento y aquí lo que ocurre es que una empresa quiere marcar sus condiciones”. Aspecto que también remarcó Alfredo Iturricha (PP), al que ya le empieza a “molestar” que una empresa sea la que venga a decir cómo se debe prestar un servicio y en qué condiciones: “Es intolerable”.
Todo lo contrario opinan los grupos municipales de izquierda, dado que Iratxe López de Aberasturi (EH Bildu), recriminó “lo mal que encaja la críticas este Ayuntamiento porque la única realidad es que los tres rocódromos están cerrados”. Por su parte, Juan Cerezuela (Podemos) por lo que apuesta es por que “haya tantas reuniones como sean necesarias para que haya un acuerdo de mínimos en esta cuestión”. Lo mismo que Óscar Fernández, (Irabazi), que censuró que “un fuego no se apaga nunca echando más gasolina”.
Este extrabajador de los rocódromos criticó ayer la “falta de coherencia” por parte del Ayuntamiento para sacar adelante un modelo adecuado de gestión.
La edil de Deportes de Gasteiz remarcó ayer que “la Administración nunca ha errado en esto”.
El edil jeltzale volvió a destacar que el Ayuntamiento es el cliente, por lo que no se tiene por qué sentar a negociar sino prestar un servicio con el precio por hora que considere oportuno.
Para el edil del PP es intolerable que este hecho se produzca, motivo que ha llevado a su grupo político a apoyar al gobierno municipal de Urtaran.
La edil de EH Bildu recordó que cuando empezó la legislatura había dos abiertos y en la actualidad, en cambio, ninguno.
El edil de Podemos apuesta por cuantas reuniones sean necesarias para resolver el conflicto.
El concejal de Irabazi también aboga por el diálogo para que los rocódromos se reabran.