llodio - El Ayuntamiento de Llodio va a aprovechar la obra de asfaltado que se va a llevar a cabo en los próximos meses en la calle Virgen del Carmen para efectuar el cambio de todas las luminarias que configuran el alumbrado público de la zona. Para ello, ha reservado cerca de 60.000 euros destinados a la adquisición de una treintena de farolas que, acordes a los nuevos compromisos en materia de ahorro energético, serán de luces led.

La sustitución de las farolas de Virgen del Carmen se engloba en el programa anual que ha permitido renovar ya el alumbrado de otras zonas del centro urbano laudioarra, tales como Avenida Zumalakarregi y calle Nervión, entre otras. En todos los casos se han sustituido las antiguas bombillas por otras más modernas que mejoran la calidad lumínica y ahorran energía.

Por otro lado, los polígonos laudioarras de Industrialdea y Arza, entre Tubacex y Tejería, van a ver llegar la largamente demandada banda ancha, gracias a los últimos contactos mantenidos en la agencia de desarrollo local entre las empresas de Laudio Group, la Cámara de Comercio y Spri. Y es que, en estos encuentros se analizó el programa Euskadi banda zabala con el que Lakua ha abierto la convocatoria para que las empresas de telecomunicación hagan ofertas que lleven la conexión de internet de alta velocidad hasta los polígonos industriales. En concreto, desde el equipo de gobierno esperan que los trabajos se adjudiquen a finales de este mes, a fin de poder contar con banda ancha durante el primer semestre de este año.

Virgen del Carmen es una de las zonas de Llodio en las que también se están levantando nuevas viviendas. Se trata de 46 pisos libres en lo que durante años ha sido un aparcamiento provisional en pleno centro urbano, de las que ya están vendidas un 70%. Por su parte, en la calle Nervión, en la parcela del antiguo batzoki, se construye otra promoción de 58 viviendas en régimen de cooperativa, que permitirá terminar de urbanizar una de las zonas más céntricas de Llodio, que se había degradado en los últimos años. - A. Oiarzabal