VITORIA - La secuelas del ataque a la cruz de Olarizu y el enfrentamiento que ha generado entre el concejo de Mendiola y el Ayuntamiento de Gasteiz vivió ayer un nuevo episodio con la respuesta del primer edil, Gorka Urtaran, a una misiva enviada desde el órgano representativo de Mendiola. El regidor jeltzale cuestionó la “representación de la voluntad de todos los residentes de Mendiola” por parte de los firmantes que le remitieron el escrito. Tachó la actitud de ese órgano como de pretender “generar polémica” después de celebrar una asamblea en la que la mayoría de los potenciales participantes “no recibió la convocatoria de la cita”. No se quedaron ahí las acusaciones y críticas de Urtaran al llegar a cuestionar la opinión de una asamblea “a la que acudieron únicamente seis o siete vecinos”, espetó. Ahondó en esa línea de argumentos al señalar una opción como “hacer de nuevo la convocatoria de otra asamblea para que le pueda llegar la cita a todo el mundo”, concretó.
En la carta enviada al Consistorio gasteiztarra desde el concejo de Mendiola se prohibió llevar a cabo cualquier tipo de reparación o actuación sobre el monumento de hormigón. La única intromisión que se permite al Ayuntamiento es la referida a las “actuaciones preventivas” que estimen los técnicos llevar a cabo con el fin de que no se derribe la cruz tras el ataque del pasado día 20.
coste de la reparación A pesar de esas recomendaciones transmitidas desde Mendiola, Urtaran se ratificó en la intención de actuar desde el Ayuntamiento para reparar la cruz, pese a no estar en terreno de Gasteiz. Deslizó una posibilidad que puede estar barajando el equipo de gobierno para reclamar el coste que suponga la restauración del monumento. “Veremos si hay que pasar alguna minuta”, advirtió con seriedad el alcalde a la junta de Mendiola.
Concluyó su batería de críticas con la recomendación a los integrantes de ese concejo para “conocer bien la historia y dejarse de polémicas. La cruz no es un símbolo franquista”, espetó con rotundidad en su última rueda de prensa del año. “Es un elemento que forma parte de nuestra diversidad y cultura”, remarcó Urtaran en defensa del elemento de hormigón. - J. L. C. / Foto: P. Barco