VITORIA - El Ayuntamiento de Gasteiz presentó en la tarde de ayer ante la Policía Local una denuncia por los daños ocasionados por el ataque nocturno contra la base de la cruz de Olarizu. En la mañana de ayer este monumento de hormigón apareció con su peana seriamente alterada por el sabotaje de varias personas. Con la utilización de una radial actuaron sobre el basamento de la cruz de hormigón, desgastando los laterales y hasta llegar a las guías metálicas sobre las que se sujeta la cruz. En ellas también realizaron varios cortes, que ponen en peligro su estabilidad y remataron el ataque con una serie de cuerdas atadas a la misma, como invitando al derribo del monumento.
RESPUESTA DE LAS FORMACIONES Las imágenes del sabotaje junto a su reivindicación se difundieron a través de la cuenta de Twitter de Hala Bedi y levantaron una oleada de comunicados de condena. El alcalde de Gasteiz, Gorka Urtaran, defendió el símbolo que remata el cerro. “Es intolerable que una minoría se tome la justicia por su mano y decida lo que tiene que permanecer y derribarse. No lo vamos a permitir”, espetó. También desde el obispado de Gasteiz se pronunciaron por el “ataque a un símbolo religioso que no tiene connotaciones políticas”, enmarcaron. La cruz es una “parte de la silueta de la ciudad, meta de muchos paseos y recuerdo de una obra espiritual y humana como fue la santa misión”.
Desde las formaciones municipales lo hizo la portavoz del PP, Leticia Comerón, “preocupada por el incremento de la radicalidad y por la ofensa para los vitorianos en estos días tan señalados”, lamentó. Desde EH Bildu se apuntó a que este tipo de acciones “no facilitan un debate sosegado sobre los símbolos franquistas”, comentó la formación abertzale.
Desde Podemos se sumaron a la condena municipal de todos los grupos “contra el sabotaje de este monumento considerado por parte del sentir ciudadano patrimonio del municipio”, remarcó el portavoz, Jorge Hinojal. Aludió también a los “cauces democráticos” sobre los que debiera discurrir cualquier proceso de “eliminación o contextualización de elementos dictatoriales”.