Vitoria. Morales ha advertido en rueda de prensa del incremento que se ha producido en la llegada de menas a Álava desde el verano, ya que se pasó de 59 en junio a 83 en septiembre, lo que llegó a generar una "sobreocupación" en el centro de atención de Bideberria, que admitió el propio diputado general, Ramiro González.
Según los datos que el Gobierno alavés ha facilitado al PP a través de una pregunta tramitada en la Cámara foral, a 10 de diciembre la Diputación acogía a 52 menas bajo tutela y a otros 38 con los que estaría tramitando esa tutela mientras se les atiende en diferentes centros forales, como el de Sansoheta, donde Morales ha asegurado que "suponen ya una tercera parte" a pesar de allí tienen un protocolo de actuación con los menores "muy diferente" al de los menas.
"Vemos cómo se están colapsando todos los centros de atención al menor dependientes de la Diputación de Álava, porque ya hay menores extranjeros no acompañados en 10 recursos de forma permanente y habitual", ha alertado Morales, que ha achacado el crecimiento de la llegada de menas a "un efecto llamada clarísimo" generado "por la política de inmigración irresponsable de Pedro Sánchez".
La dirigente del PP ha vinculado las fechas del incremento con la decisión del Gobierno central de acoger a los refugiados del barco Aquarius, y ha asegurado que la ocupación de plazas en centros que no están diseñados para la atención a los menas "distorsiona el proyecto original" de cada recurso "y pone en riesgo los programas de atención a menores alaveses".
"El criterio para afrontar esta llegada masiva es el de ir sobre la marcha e improvisando", ha criticado Morales, que ve que "cada vez es más difícil la atención personalizada y la labor de los monitores ante casos tan distintos con los que tienen menos margen de maniobra al estar desbordados, porque los centros se están utilizando para lo que no son".
En ese sentido, se ha referido a la "situación complicada" en Sansoheta con "conductas muy complicadas de los adolescentes que viven allí", y que han generado amenazas y agresiones a los educadores del centro que han llevado a muchos a pedir la baja.
Por ello, Morales ha pedido un rediseño del modelo de atención en el área del menor para evitar que continúe esta problemática, y ha apelado a los técnicos de la Diputación para que eviten que ese rediseño (solicitado por las Juntas Generales de Álava y anunciado por la responsable del área) mezcle protocolos de atención "muy diferentes".