Vitoria. La portavoz popular, Leticia Comerón, ha denunciado en rueda de prensa que la Junta de Gobierno Local rechaza las peticiones de información que plantean los concejales de la oposición, que de acuerdo a la ley y el reglamento interno del Ayuntamiento tienen derecho a consultar aquellos expedientes e informes que necesiten para realizar su labor de control.

La líder de los populares cree que "la gota que ha colmado el vaso" han sido dos nuevos casos en los que se les ha negado información: una pregunta en comisión sobre la adhesión de vecinos a la regeneración de Coronación "en la que el concejal dijo que tenía datos pero no los iba a dar" y el "oscurantismo" en la financiación de la Final Four de baloncesto, que se celebrará en la ciudad el año que viene.

Comerón ha reconocido que estas situaciones se han producido a lo largo de toda la legislatura, pero que en estos últimos meses "están aumentando, con más descaro y peores formas cada vez", algo que considera "inaceptable e ilegal" porque contradice el reglamento.

Ante esta situación el PP ha presentado una moción para reprobar al equipo de gobierno y ha pedido el apoyo del resto de la oposición porque hay "un sentir similar" en estos grupos.

EH Bildu, Podemos e Irabazi han presentado sin embargo una enmienda de sustitución conjunta a la moción del PP en la que se cambia la reprobación por una crítica al oscurantismo del Gobierno. Estos tres grupos han defendido su enmienda en una nota y han cuestionado la moción del PP y su "objetivo electoralista".

Explican que su enmienda responde a "la necesidad de reconducir la ocultación en la gestión del equipo de gobierno" y apuestan por "la creación de marcos de trabajo y vías de colaboración para acabar con la opacidad y la falta de transparencia con la que el equipo de gobierno gestiona proyectos estratégicos para Vitoria".

Los tres partidos de izquierda señalan además que "la reprobación sólo se puede aplicar a los concejales delegados y no al alcalde o al equipo de gobierno, y sirve para manifestar el desacuerdo con una actuación de dichos ediles".

En esta misma línea, fuentes municipales han señalado a Efe que la figura jurídica de la reprobación puede aplicarse a un concejal, pero no a un equipo de Gobierno, ni a un alcalde, que se enfrentaría en todo caso a una moción de censura. Entienden por tanto que el PP no pretende "reprobar" el Ejecutivo, sino visibilizar su descontento con la gestión del Gobierno PNV-PSE.

Si en el pleno de mañana se mantienen estas posturas encontradas podría producirse un triple empate a 9 ediles: el PP por un lado, los grupos del Gobierno por otro y los partidos de izquierda por otro. En este caso el voto de calidad del alcalde inclinaría la balanza, con lo que se tumbaría tanto la moción del PP como la enmienda de los otros grupos de la oposición.