Vitoria - Una de las rutas nocturnas sobre patines es la de París, Friday Night Fever, que empezó en los años 90. Al principio, este acontecimiento contaba con apenas un centenar de participantes, pero con el paso del tiempo, a medida que se fue extendiendo la práctica de este deporte, su éxito aumentó llegando algunos viernes a contar con más de 20.000 patinadores expertos. Esta afluencia de participantes necesitó una profesionalización de la organización, ya que la asociación iniciadora empezó a solicitar socorristas y servicios de seguridad.

Mientras tanto, la Jefatura de Policía de París creó en 1998 un destacamento especial (el primero en el mundo) de policías patinadores, particularmente entrenados para acompañar el paseo de los viernes.

Pese a ellos, a los patinadores parisinos principiantes también les queda el consuelo de la marcha de los domingo al mediodía, la Roller&Coquillages, que tienen un ritmo más tranquilo y menos deportista. Empiezan en La Bastilla sobre las 14.30 horas, con veinte kilómetros de recorrido y una duración de tres horas, con todo tipo de participantes, incluidos adultos empujando cochecillos de niño.

Rutas estatales En el Estado también hay otras marchas sobre patines dignas de mencionar. Una de ellas es la de Barcelona en el que la Villa Olímpica es el punto de encuentro de centenares de patinadores que se reúnen cada semana para hacer rutas nocturnas por la ciudad condal. La Asociación de Patinadores de Barcelona (APB) se encarga de realizar este evento. Actualmente, tienen programadas hasta 12 rutas diferentes que revisan semanalmente, por si tienen que hacer algún cambio o desviación.

En Madrid también comienza a ser célebre la Madrid Friday Night Skate, un paseo en patines que recorre el corazón de la capital del reino todos los viernes por la tarde-noche. Se trata de una marcha, a modo de manifestación, en la que la Asociación de Patinadores de Madrid (APM) reclama que los patines puedan ser utilizados legalmente en la ciudad, como un medio de transporte alternativo, ecológico y sostenible, equiparándose a los derechos de las bicicletas. - A.S.