Vitoria - Para el padre del Plan de Movilidad Sostenible de Vitoria, Salvador Rueda, el modelo por antonomasia para generar un territorio polinuclear es el ferrocarril. Sin embargo - lamenta-, el servicio de Álava para conectar su capital, a través del eje Miranda-Vitoria-Dulantzi-Agurain y Altsasu, tiene “un esquema de explotación poco atractivo, sin ninguna regularidad de los servicios, con tiempos totales de los viajes variables, sin un patrón claro de parada en las estaciones menores y con un servicio y tarifas que varían entre los cuatro euros (Regional Exprés) y los 13 euros (Alvia)”.
Con el fin de solventar estas deficiencias, EH Bildu defiende la creación de Arabatran, un proyecto que, a modo de tren de cercanías, pasaría por este corredor ferroviario entre Miranda (Burgos) y Altsasu (Navarra), y que a su paso por Gasteiz aprovecharía el actual trazado del tren, una vez cristalice el soterramiento, a modo de tranvía o bus exprés. Sin embargo, el gabinete Urtaran, en una primera conclusión, descartó ayer el Arabatran por no ser “ni viable ni rentable social ni económicamente”. Además, afirma que entraría “en competencia directa” con la red foral de autobuses y, respecto a Vitoria, que “no sería explicable” que se volviera a implantar en la superficie un nuevo ferrocarril tras el soterramiento y menos “tras la inversión por recuperar este espacio en la ciudad”.
El equipo de gobierno hizo esta valoración horas después de conocer las conclusiones de dicho estudio, valorado en 60.000 euros, y elaborado por la Agencia de Ecología Urbana de Barcelona, de la que es responsable el propio Rueda, y la firma MCrit, que precisamente proponen cinco alternativas para Arabatran: las dos primeras para poner en marcha un servicio interurbano y las tres siguientes para conectar los nuevos barrios gasteiztarras.
La puesta de largo de este documento -por la mañana a representantes del Ayuntamiento, la Diputación y el Gobierno Vasco, y por la tarde, en el Foro de Movilidad Sostenible- comenzó explicando las dos primeras alternativas como servicio interurbano. La primera consistiría en “intensificar los servicios del ferrocarril mediante 10 trenes diarios, por sentido en el corredor, independientemente de los que opere Renfe”, aunque “muy compleja”, según los técnicos.
La segunda propuesta, llamada Optimización y refuerzo de la oferta actual, sería la de aprovechar los trenes actuales con la posibilidad de introducir novedades, como crear un nuevo apeadero en Vitoria, hacer paradas a demanda en determinados puntos, como Zabalgana, Jundiz y Salburua (lo que llevaría a tener que llegar a “acuerdos” con Madrid) y cubrir los déficits actuales con servicios de autobús.
Tramo urbano Las siguientes tres alternativas son las que se centran en unir el este y oeste de Vitoria, esto es, Salburua y Zabalgana. Una de estas posibilidades es la que plantea convoyes sobre la traza actual, con la posibilidad de 8 nuevos apeaderos en Gasteiz para servicios con frecuencias de 10 minutos en hora punta. Se haría, por tanto, sin soterrar y se estima en 37 millones de euros.
La cuarta idea que plantea el estudio es hacerlo por las futuras galerías del soterramiento y compartiendo espacio con el tren de alta velocidad, por 47 millones de euros, algo que los expertos desaconsejan. Y la última sería conectar Salburua con Zabalgana por encima del soterramiento, ya sea en tranvía (105 millones) o en bus exprés (16 millones). Esta última del BEI “sería la más viable y mucho más económica que la del metro ligero”, -especifica el estudio- “por poner 8 kilómetros de nuevas vías”.
Servicio interurbano. Se plantean dos alternativas (intensificar los servicios y optimizar la oferta actual con servicios de autobús).
Tres alternativas para Vitoria. Sin soterramiento (37 millones de euros): con soterramiento por el túnel (47 millones de euros), que se descarta. Y por encima del soterramiento en tranvía (105 millones de euros) o en Bus Eléctrico Inteligente (BEI), con 16 millones de euros, que circule por encima del túnel del centro, pero por las avenidas de Salburua y Zabalgana en la periferia.