vitoria - Ocho asociaciones vecinales de Gasteiz se han unido para crear la Herri Eskola, una iniciativa que recoge y difunde la experiencia acumulada por Interbarrios desde el año 2000.

Arrancan con las formas organizativas. ¿Quieren preparar a los ciudadanos para manejarse ante las instituciones?

-Queremos que la gente del movimiento vecinal que empieza ahora esté formada. Confrontamos dos culturas, la institucional y la vecinal. La primera echa migas a la segunda para ver si pica, pero nosotros defendemos que el barrio es el núcleo y que tenemos que hacer valer nuestros derechos. El Ayuntamiento ha creado una escuela abierta a la ciudadanía que le cuesta 6.000 euros y quiere utilizarla para amaestrar a la gente. Nosotros presentamos una alternativa presupuestada en 500 euros para transmitir experiencia.

¿Cómo articulan la Herri Eskola?

-Pensando en el desarrollo de las reuniones de Interbarrios, introducimos un tema cada mes. Hemos presentado un programa, podemos dar cabida hasta a diez personas y ya nos están pidiendo que abordemos otros temas. Poco a poco iremos realizando un diseño y un balance de todo lo que nos vaya aportando la ciudadanía.

¿Cómo son las clases?

-No es necesario que las imparta un técnico, puede ser cualquier persona que tenga una experiencia que transmitir. El día en que tratemos el 3 de marzo desde el punto de vista organizativo vendrá la hermana de uno de los asesinados e iniciará la clase. Intervendrá 10 minutos con un guión y luego participará todo el mundo.

¿Funciona el intercambio de ideas?

-Hay gente que necesita debatir con otra gente el modelo que tienen y el modelo que sería ideal. El soporte que supone el mantenimiento de Interbarrios es una garantía para la gente, porque el Ayuntamiento no crea asociaciones, las destruye. Hay un montón de asociaciones que han dejado de celebrar fiestas y poco a poco lo va dejando todo el mundo. Es tal el aparataje que exige el Ayuntamiento y la presión que ejerce que resulta casi imposible. Nosotros haremos el año que viene, pero sin txosnas por la imposición de multas. - A. Burdain