Vitoria. La llegada de Larrimbe a la formación morada refuerza al grupo tras la expulsión de los cuatro procuradores díscolos a finales de julio, lo que dejó a Podemos con cuatro representantes, incluida Polaina, que se encontraba de baja pero estaba alineada en el sector de los junteros expulsados.

A su regreso, la exprocuradora presentó su renuncia al considerar que el trabajo de su grupo en el parlamento foral es "un fraude a la ciudadanía", y explicó los motivos de su marcha en una carta en la que denunció "represalias ideadas con premeditación", "hostilidad y hostigamiento", y "ataques y amenazas como praxis diaria" dentro del grupo juntero de Podemos.

La fractura del grupo se evidenció el año pasado cuando cuatro procuradores votaron en contra los presupuestos alaveses de 2017, mientras que otras tres junteras se abstuvieron en línea con lo decidido por la dirección vasca de Podemos.

Polaina no participó en la votación por estar de baja, aunque posteriormente firmó un manifiesto de apoyo al sector crítico, que ahora forma parte del Grupo Mixto con la denominación de Orain Araba.

Apenas unas semanas después de recibir el alta médica y reincorporarse a las Juntas, Polaina presentó su renuncia.