VITORIA - El debate presupuestario ya está en marcha tras desvelar PNV y PSE el martes los números y proyectos para continuar con el trabajo de la primera parte de la legislatura. El alcalde, Gorka Urtaran, desvela a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA su propósito de alcanzar un acuerdo para llevarlos adelante.
Desvelado ya el proyecto de presupuesto 2018, ¿qué etiqueta o adjetivo le pondría?
-Es el de la consolidación de una ciudad en marcha. Una Vitoria que es atractiva para poder invertir y que es muy agradable y cómoda para vivir.
Los 377 millones contemplados son 16 más que los de este ejercicio en curso y suponen el mayor incremento en la cantidad de los últimos años.
-Con la incorporación de esos 16 millones adicionales va a permitir desarrollar más proyectos y dar más respuestas a más demandas de la ciudadanía con lo que entendemos que es un proyecto muy bueno.
En estas últimas dos grandes cuentas de la ciudad se ha podido contar con 28 millones más en total. ¿Señal de que la economía va despegando hacia cifras más positivas?
-Es una buena señal que demuestra, primero, que la actividad económica está cada vez mejor en Vitoria y, por otra parte, que el Ayuntamiento dispone de más recursos para hacer frente a los proyectos estratégicos de la ciudad y también a las demandas cotidianas de la ciudadanía.
Esa cantidad adicional proviene de otras entidades como Fofel, Gobierno Vasco y Diputación. ¿No es señal de excesiva dependencia de ellas para completar los ingresos?
-Es cierto que a pesar de que la situación económica es mejor y que este Ayuntamiento dispone de más recursos para hacer frente a los proyectos estratégicos de la ciudad, sigue estando en una situación delicada. Hay que recordar que heredamos un agujero económico de 68 millones de euros que está condicionando el desarrollo de proyectos en la ciudad. Gracias al Plan Económico del inicio de la legislatura lo hemos reducido a 27 millones de euros. Se ha duplicado el canon de capitalidad, procedente del Gobierno Vasco, que ha pasado de cinco a diez millones de euros y que se incorpore una aportación adicional de la Diputación Foral de Álava, por valor de 2,5 millones de euros, para proyectos estratégicos del territorio que se desarrollan en la ciudad. Si a eso le sumamos que el mejor comportamiento de la economía implica unas mayores ingresos y que el Fofel también se incrementa, hace que la cifra sea de 16 millones de euros más.
¿Se va a poder ir terminando con esa habitual recomendación del Interventor para que el Ayuntamiento tenga capacidad de generar ahorro neto y reducir la deuda?
-Para ello tendremos que hacer un análisis serio entre todas las formaciones políticas. Es cierto que se viene advirtiendo de la poca capacidad de ahorro neto de esta institución. El gasto corriente es importante. Sólo en el capítulo de las nóminas, con la incorporación de 32 nuevos integrantes de la Policía Local y la previsión de jubilación de agentes del cuerpo a los 60 años de edad o el nuevo personal del centro cívico Zabalgana, ya se generan 6,5 millones de euros más en gastos. Es necesario, por tanto, hacer una política económica rigurosa y seria, teniendo en cuenta que el ahorro neto sigue siendo todavía una cantidad pequeña en el global de las cuentas.
El margen de actuación queda un tanto reducido con capítulos como personal, que supone un 40%, o el 16% que constituye Medio Ambiente y Espacio Público. Sólo con esas áreas ya se destina el 53% del total.
-Es cierto que ya con el solo hecho de abrir la persiana, con todos los recursos públicos, servicios, equipamiento y personal del Ayuntamiento, hace que gran parte se destine actividades básicas y el margen que resta al gobierno siempre es pequeño. Esto sigue siendo así y estamos aplicando rigor económico para reducir la deuda y el déficit, al tiempo que impulsar proyectos clave para la ciudad, como son los de la movilidad sostenible, y de ahí que Espacio Público acapare tanto presupuesto.
En ese capítulo, el impulso va a ser palpable con actuaciones del tranvía, autobuses eléctricos, híbridos y el soterramiento.
Es indudable que la ciudad está en marcha y que el Presupuesto 2017 era absolutamente necesario y fundamental para impulsar inversiones estratégicas. Se ha ido demostrando con el impulso de 20 obras estratégicas en las calles de Vitoria. De este modo la ciudad está en marcha, va mejor y con el Presupuesto 2018 se consolida la tendencia para situar a Gasteiz entre las ciudades más atractivas de Europa para invertir y para vivir.
Sobre el Bus Eléctrico Inteligente (BEI), señaló la consejera de Infraestructuras del Gobierno Vasco, Arantxa Tapia, que había que redefinir el proyecto. ¿Cuál es la situación actual?
-Se está trabajando en la definición de los detalles de ese autobús eléctrico inteligente y les puedo trasladar que la inversión que va a hacer el Gobierno Vasco, la Diputación Foral de Álava y el Ayuntamiento de Gasteiz en materia de movilidad en los próximos dos años asciende a 65 millones de euros. Esta cantidad era hasta ahora totalmente desconocida en la ciudad y la apuesta por la movilidad sostenible, eléctrica de este gobierno es rotunda y clara.
Hay también partidas que muchos colectivos y grupos se quejan por aparecer un año tras otro sin llegar a concretarse. Son los casos de Gasteiz Antzokia, Emakumeen Etxea o el entro Eratzen, entre otros.
-Con respecto al Gasteiz Antzokia, si hay algún retraso es debido a que los propios colectivos euskaltzales rechazaron el proyecto inicial del Ayuntamiento. Tengo que aceptarlo y creo que es una cuestión que debe de salir de la mano de todos estos colectivos. Si se ha producido un retraso en esta legislatura es porque, primero EH Bildu, y segundo, los colectivos euskaltzales descartaron y rechazaron el proyecto que habíamos puesto sobre la mesa para poder utilizar también el frontón actual como espacio para el Gasteiz Antzokia y también como un espacio versátil para los vecinos. Ahora, lo que nos corresponde es redefinir todo ese proyecto y, de no haberlo tenido que hacer, ahora estaríamos, probablemente, contratando las obras del mismo. Por tanto, cada uno debe de asumir las responsabilidades que tiene. Con respecto a Emakumeen Etxea, estamos esperando a que el colectivo, dentro del Elkargune de Igualdad, decida cual es el emplazamiento más adecuado para impulsar este importante proyecto. Nosotros ya tenemos una alternativa que, creemos, es la más digna y dignifica el trabajo que hay que hacer desde el área de Igualdad. No obstante, estaremos también a la espera de lo que decida el colectivo. Respecto a la oficina de turismo en la gasolinera Goya, estamos cerrando un acuerdo con el propietario para que podamos adquirir ese edificio y poder desarrollar un proyecto versátil, no sólo relacionado con la atención al turista , sino que también sea un espacio expositivo para el fondo fotográfico de Alberto Schoomer.
Conocidos ya los números y grandes líneas de actuación, toca encarar el proceso negociador con todas las fuerzas políticas. ¿Por dónde se van a orientar las conversaciones?
-Abrimos esta etapa con el ánimo de negociar con todas las fuerzas políticas y mostrar nuestra disposición al diálogo como hemos hecho en esta legislatura y la pasada. Estando en la oposición, el PNV fue capaz de acordar dos presupuestos con el Partido Popular y un Plan Estratégico de inversiones. Así se logró el impulso para los centros cívicos de Salburua y Zabalgana. Estando en la oposición hemos demostrado altura de miras y responsabilidad para trabajar por el bien de Gasteiz. Por lo tanto, estando en el Gobierno eso se da por sentado. Además, durante estos años de legislatura ya hemos sido capaces de acordar con todas las fuerzas políticas como EH Bildu, Podemos e Irabazi, y con el PP las ordenanzas fiscales. La capacidad y voluntad de negociación está más que demostrada. Somos los únicos con capacidad de poder negociar y acordar con todos en positivo. Cuando la oposición quiere hacer política destructiva no tiene reparo en juntarse la izquierda con la derecha y saltarse cualquier impedimento.
Las fuerzas que le han apoyado estos años siempre han terminado recurriendo a la crítica en términos como los incumplimientos o falta de ejecución de partidas.
-Creo que es un latiguillo que se ha usado por parte de aquellos partidos políticos que ahora han dejado de apoyar un proyecto de cambio en la ciudad. Quizá no lo apoyaron nunca. Me sorprende mucho que, al año de iniciar esta legislatura, EH Bildu se bajara del carro del cambio político y de este proyecto que pretende hacer política de otra manera. Eso fue un error estratégico por su parte. No obstante, quiero poner en valor los acuerdos y tender la mano a todas las formaciones, desde el Partido Popular hasta Irabazi. Tienen que pensar en el bien de Vitoria y espero que, por una vez tengamos todos altura de miras y la flexibilidad suficiente para acordar el Presupuesto 2018. Por mi parte, la disposición es absoluta para llegar a los acuerdos.
¿Está en peligro ese cambio iniciado en el año 2015 o se ha ralentizado con estos vaivenes?
-Lo que está ocurriendo es que, en estos momentos, se está haciendo la política municipal de forma responsable y más rigurosa, trabajando con todos los colectivos y escuchándoles, también a la ciudadanía y teniendo en cuenta sus prioridades y pensando únicamente en el bien de Vitoria. Acordaré con quien haga falta si eso es bueno para Vitoria y lo tengo muy claro.
Tras el acuerdo de ordenanzas fiscales con el PP hay quien ve este consenso como el paso previo para uno posterior en los presupuestos.
-No tiene por qué ser necesariamente así. El año pasado el pacto de ordenanzas fue con EH Bildu, Podemos e Irabazi. Luego el giro fue de 180 grados por parte de EH Bildu en la cuestión del presupuesto, cambió de actitud y ni siquiera quiso negociarlos. Desconozco lo que ocurrirá este año, pero como he comentado, hemos demostrado tanto en la oposición como en el gobierno voluntad y capacidad de negociación y acuerdo con todas las formaciones, pensando única y exclusivamente en el bien de Gasteiz, que es lo que me mueve.
Los Presupuestos anteriores se aprobaron con ese acuerdo con las formaciones de izquierda, en 2016, y el actual con la cuestión de confianza. De todas las posibles todavía falta la prórroga, ¿puede ser ese el camino ante la ausencia de acuerdos?
-Todas esas opciones están puestas encimas de la mesa, pero no contemplo nada más que la del acuerdo. Creo que hemos presentado un proyecto de presupuesto muy bueno y muy atractivo para la ciudad, que mejora de forma significativa las cuentas de este 2017, que ya eran buenas. Hemos demostrado que la ciudad está en marcha, va mejor y tiene 20 actuaciones para mejorar la calidad de vida. El año 2018 va a significar consolidar la ciudad en marcha y que está mejor cada día, tanto para vivir como para invertir.
Da por seguro entonces que va a haber acuerdo con otra formación y no contempla la situación de falta de sintonía con cualquiera de las fuerzas.
-Lo que ahora planteo es un periodo de negociación y, esperemos que también de llegar a un acuerdo. Esa es mi disposición y remarco la capacidad contrastada para llegar a acuerdos que se ha demostrado. Ahora veremos cuál es la capacidad y voluntad para llegar a acuerdos de los demás grupos políticos de este Ayuntamiento. Mi mano está tendida para poder explorar esa vía y para llegar al objetivo final de contar con unos presupuestos para el año 2018.
Además de los grandes proyectos que refleja el Presupuesto hay otras actuaciones que están en curso. Masterplan Centro lleva cuatro meses de desarrollo, ¿Cuáles son sus resultados hasta la fecha?
-Es una actuación que está muy viva y dinámica, a pesar de las trabas que el partido popular quiere imponer. No se puede entender que apoyen la operación planteada en el antiguo edificio de Hacienda, y no se quiera apoyar la planteada en el solar de la calle Florida 53, cuando es exactamente igual. Creo que aquí hay un intento del Partido Popular por dinamitar, una vez más, un proyecto que es bueno para la ciudad, pero que como no es de ellos, y ahora como están en la oposición lo pretenden obstaculizar. Masterplan se ha impulsado de forma significativa. El edificio de la antigua ARICH es ya un comercio. Las antiguas oficinas del Ayuntamiento en San Prudencio, van a albergar a los trabajadores del Instituto Foral de Bienestar Social, el convento de las Brígidas tiene su licencia para ser una residencia. Hemos cerrado un convenio con los propietarios del solar de Florida 53, que si no sale adelante es por el rechazo y la oposición del Partido Popular, que no se entiende. Si de verdad quiere al centro e impulsar su reactivación social y económica no entendemos la razón de su oposición. Estamos cerrando con Repsol lo que puede ser la transmisión del Edificio Goya y en las próximas semanas creo que podremos tener noticias. Lo mismo ocurre con el Palacio Zulueta, al estar haciéndose ya el pliego para que sea la Casa del Vino y tenga esa conexión con Rioja Alavesa. En estos meses se ha impulsado de forma importante el proyecto, por no decir el de Santa Bárbara, cuyas obras ya están en marcha.
El soterramiento va a volver a recuperar en los próximos años el primer plano informativo con las obras a su paso por Gasteiz.
-Ahora se están haciendo las catas para ver el subsuelo y analizar cual de las dos alternativas se pueden impulsar en su construcción. Quiero recordar que es uno de los principales objetivos que tiene este Ayuntamiento de cara al año 2023-2025. Ha sido con este gobierno municipal cuando se ha conseguido transformar la llegada de la alta velocidad en superficie a soterrada y cuando hemos conseguido que se puedan soterrar hasta tres kilómetros del corredor ferroviario. Además se ha conseguido que, frente a las pequeñas mejoras que contemplaba el anterior equipo de gobierno, en la estación de Dato, pueda ser una nueva estación moderna y soterrada que de una solución definitiva a su integración en Vitoria.
Diciembre va a ser un mes clave para la solución constructiva del soterramiento.
-Va a depender del estudio informativo que se está trabajando entre Gobierno Vasco y el Ministerio de Fomento para concretar la mejor solución y luego ya se podrán analizar las alternativas de uso de los terrenos libres.