amurrio - El Ayuntamiento de Amurrio ha adjudicado en 29.837 euros a la empresa Asfaltados y Construcciones Morga, las obras de derribo de las antiguas aulas del euskaltegi de AEK, ubicadas en el número 15 de la calle Mendiko, en el área del colegio Lucas Rey, que fueron asoladas por un temporal de viento en diciembre de 2011. Se trata de demoler todas las edificaciones e instalaciones hasta la cota cero del solar para la posterior urbanización e instalación en la parcela de un área de juegos infantiles. No en vano, tras el vendaval las instalaciones quedaron inutilizadas y la coordinadora de alfabetización euskaldun alcanzó un convenio con el Ayuntamiento para trasladar su actividad a parte de las antiguas escuelas de Matías Landaburu, que fueron sometidas a un intenso lavado de cara para poder acoger su nuevo cometido.
La obra, que lleva paralela el desmontado de la línea aérea de baja tensión, ya tramitada por la institución municipal ante Iberdrola, fue una de las seleccionadas en el programa de presupuestos participativos 2017-18 AmurriokoEkin.
El resto, hasta agotar la partida de este 2017, se invertirá en crear otra zona de ocio infantil en el centro escolar Zabaleko del barrio San José, así como a obras de eliminación de barreras arquitectónicas, de acuerdo al Plan de Accesibilidad vigente. Con los 200.000 euros del próximo ejercicio, está previsto abordar la mejora general del alumbrado.
Cabe recordar que hasta el próximo lunes, la población tiene tiempo para rellenar el cuestionario elaborado por el Ayuntamiento de cara a que personal técnico, político y ciudadanía puedan reflexionar sobre las cosas que han salido bien y sobre aquellas que pueden mejorarse dentro del proyecto de presupuestos participativos.
El documento a rellenar está disponible en la web https://amurriokoekin.eus y también físicamente en la casa de cultura de la calle Landako, en el polideportivo municipal Bañueta Kiroldegia y en la propia Casa Consistorial. Fruto de esta valoración se espera identificar los puntos fuertes y débiles del proceso, de manera que sea posible aumentar el interés y la confianza en este modelo de decisión en torno a los presupuestos municipales. Y es que en la última fase sólo participaron 710 personas, un 8,10% de la población llamada a votar. - A. Oiarzabal