vitoria - La barra libre de los más de 80 pisos turísticos que operan actualmente en Álava tiene los días contados. Hasta ahora, los titulares de este tipo de alojamientos únicamente debían dar de alta la propiedad en el registro del departamento de Turismo del Gobierno Vasco y firmar una declaración responsable para iniciar su actividad como arrendadores, pero desde ayer, tras la firma de un protocolo de actuación entre la Administración Turística, Eudel y los alcaldes de las tres capitales vascas, el listado de obligaciones se amplía considerablemente en toda Euskadi.
Los responsables de estos hospedajes deberán, además, observar escrupulosamente las normativas particulares de cada ayuntamiento. Prueba de que muchos de ellos no cumplían escrupulosamente con todos los requisitos es que el Ejecutivo autonómico ha remitido ya 250 cartas apercibiendo a los propietarios de una posible infracción y reclamando documentación. En el caso de que no sean capaces de acreditar la legalidad de sus instalaciones podrían enfrentarse a una orden de cierre y, en los supuestos más extremos, a sanciones de entre 10.000 y 100.000 euros.
En la actualidad, el censo de pisos turísticos disponibles en la CAV asciende a unos 2.150, si bien su número fluctúa constantemente. Más de la mitad de ellos se ubica en Donostia, concretamente 1.245, y otros 303 se localizan en el resto de Gipuzkoa, el territorio con mayor gancho del sector. Bilbao, por su parte, cuenta con 329 alojamientos y el resto de Bizkaia suma 188 más. Vitoria cierra el grupo con 49 hospedajes en la ciudad y otros 33 en el resto de la provincia. El objetivo del protocolo refrendado ayer en la sede del Gobierno Vasco consiste en que todos ellos cumplan con las reglas de juego vigentes en cada uno de los municipios sobre los que se asientan y no sólo con las normas generales dictadas por el Ejecutivo, como venía sucediendo hasta la fecha.
intercambio de información El consejero vasco de Turismo, Alfredo Retortillo; el presidente de Eudel, Imanol Landa, y los alcaldes de las tres capitales vascas, Gorka Urtaran, Juan Mari Aburto y Eneko Goia comparecieron ayer después de firmar el acuerdo de colaboración en materia de viviendas y habitaciones turísticas para aplaudir de forma unánime el avance conseguido. En cuanto los responsables municipales han comenzado a intercambiar información con Lakua, el Gobierno Vasco ha detectado cerca de 200 posibles irregularidades en los hospedajes de Bilbao y más de 50 en los de Donostia, por lo que ha remitido cartas a sus titulares con el fin de recabar documentación más precisa y para que éstos puedan presentar cuantas alegaciones estimen oportunas. En el caso de Álava, aún no se ha iniciado ningún procedimiento de este tipo porque los técnicos de Turismo del Ejecutivo autonómico aún no han dispuesto de tiempo suficiente para cruzar los datos.
En general, los incumplimientos tienen que ver fundamentalmente con las alturas en las que se encuentran estos alojamientos, ya que muchos prohíben que se establezcan en pisos superiores al primero para evitar que se generen ruidos que afecten al resto de la comunidad. Otros expedientes están relacionados con la existencia de más de un piso de estas características en un mismo portal, circunstancia vetada por diversos consistorios de la CAV.
En opinión de los representantes institucionales, la activación de este protocolo contribuirá a respetar los planes urbanísticos de los municipios y sus respectivas filosofías de crecimiento, ya que, entre otras medidas, evitará la proliferación de pisos turísticos en zonas consideradas “saturadas”, como en breve sucederá en el caso del Casco Viejo de Donostia. Además, se espera que la información compartida ayude a descubrir los alojamientos clandestinos que ni tan siquiera figuran en los registros del Gobierno Vasco.
En opinión del alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran, el proceso iniciado servirá para consolidar un modelo de turismo “responsable y sostenible” en la capital alavesa. En este sentido, señaló que el territorio se enfrenta a un reto decisivo en esta materia y explicó que este tipo de situaciones se abordan mejor desde la colaboración interinstitucional.
Declaración responsable. La Ley de Turismo obliga a los titulares de estos pisos a firmar una declaración responsable por la que manifiesta conocer y cumplir toda la normativa vigente.
Informes municipales. La dirección de Turismo trasladará a los ayuntamientos la relación de los firmantes de esta declaración. Los consistorios analizarán la situación de las viviendas y emitirán informes sobre el cumplimiento de las normativas municipales. Estos informes serán imprescindibles para la concesión de las licencias de actividad.
Números de registro. El Gobierno Vasco negocia con las plataformas que gestionan pisos turísticos en Euskadi para garantizar el cumplimiento de la Ley. Uno de los objetivos consiste en que cada anuncio que se publique vaya acompañado del número de registro concedido por el Departamento de Turismo para poder realizar seguimientos.
Cierres y multas. Para atajar los incumplimientos, el Gobierno Vasco comunica a los infractores la orden de cese de la actividad. La puesta en marcha de un expediente sancionador puede llegar a suponer multas de entre 10.000 y 100.000 euros, ya que la cantidad se incrementa progresivamente en caso de reincidencia.
Alturas y portales. El motivo más habitual de incumplimiento tiene que ver con las alturas en las que se encuentran estos pisos, ya que municipios como Bilbao o Donostia no permiten este tipo de actividad más allá de la primera planta. También es habitual que no se permita más de un hospedaje turístico por portal.
82
Álava cuenta con 82 pisos turísticos. 49 se encuentran en Vitoria y 33 en el resto del territorio.