vitoria - Las últimas agresiones homófobas denunciadas en un céntrico espacio de cruising han movilizado a la Red Transbollomarika de Gasteiz, la primera organización que reportó públicamente estos lamentables episodios. El colectivo acaba de editar un tríptico en el que aporta varias recomendaciones para actuar ante cualquier tipo de ataque, pone a disposición de las personas agredidas un número de teléfono (633 309 653) y otros canales de comunicación y enfatiza varios aspectos fundamentales como la necesidad de denunciar las agresiones, por mínimas que parezca que sean, y remarcar que tienen una motivación de odio detrás. “Aunque parece que no sucede nada, desgraciadamente la LGTBIfobia sigue existiendo. Se han conseguido muchas cosas, pero también es cierto que las personas más débiles siguen siendo agredidas”, contextualizó el activista queer Sejo Carrascosa, acompañado por integrantes de la red como Iban Albizu.
El folleto, que ayer comenzó a ser repartido entre el colectivo LGTBI de Gasteiz aprovechando la celebración de la manifestación del Orgullo, aconseja a las personas que puedan ser agredidas a “conservar la calma” y tratar de encontrar la colaboración de potenciales testigos. Además, anima a acudir al hospital o a un centro de salud en caso de haber sufrido daños físicos o psicológicos o a llamar directamente a la Policía, que es quien debe levantar un parte sobre la agresión que posteriormente servirá de prueba y, además, puede localizar al agresor en las inmediaciones.
La guía insiste en la importancia de “insistir al personal médico” en que las heridas o daños que puedan presentarse serán “fruto de una agresión trans/bollo/marika-foba”, para que así quede reflejado en el correspondiente parte de lesiones. “Ante una agresión, ¡denuncia! No te calles. Sólo tienes seis meses, cuanto antes lo hagas, mejor”, remarca el texto.
La red recuerda también que para que la agresión sea calificada como un delito de odio es necesario, además de firmar la denuncia, que en ésta aparezcan todos los datos de la persona agredida y los detalles del ataque. “Es muy importante señalar todo aquello que pueda probar que la agresión se ha producido porque somos trans, lesbianas o gays”, insiste la guía, que también anima a las personas que sean testigo de nuevas agresiones que “observen, pregunten y actúen”. La guía, por el momento, ha sido editada en euskera y castellano, pero la Red Transbollomarika tiene intención de imprimirla en más idiomas para llegar a más personas.
críticas Carrascosa denunció que en algunas de las agresiones homófobas denunciadas en los últimos tiempos en Gasteiz “ha habido malas prácticas por parte de los servicios policiales”, una realidad que achacó “a la impericia” por la falta de formación o simplemente “a la mala fe”. “Seguimos casi igual que cuando sucedió lo de Stonewall”, enfatizó el activista, que avanzó que con los datos que puedan recoger a través del teléfono o con nuevas denuncias pretenden elaborar un mapa de agresiones. “Casi tenemos que ser nosotros los que damos los consejos a las instituciones”, lamentó Carrascosa, que aludió también al largo camino por recorrer desde el plano institucional en la lucha contra la violencia machista. - C.M.O.