Vitoria. Así lo ha afirmado el diputado de Agricultura de Álava, Eduardo Aginako, en la comisión de las Juntas Generales en la que ha analizado las consecuencias de esta helada que fue "generalizada" en todo el territorio, "intensa, prolongada y tardía, lo que perjudicó más a la viña".

La Diputación ya explicó la semana pasada que la zona más afectada fue la comprendida entre Labastida y Elciego, con daños "muy significativos" también en Leza, Navaridas, Samaniego, Villabuena y Baños de Ebro. La helada afectó asimismo a las vides para txakoli de Ayala, especialmente en Amurrio y de manera más puntual en Llodio y Okondo.

"Estamos en mayo y se vendimia en septiembre. Todavía pueden ocurrir muchísimas cosas en un sentido u otro", ha dicho Aginako, y ha añadido: "Van a ser las próximas semanas las que nos digan el grado y magnitud real en el impacto en el rendimiento de la helada en la producción de la comarca".

Tras la helada la primera recomendación de la Diputación fue de la no actuar durante al menos un semana sobre la vegetación y empezar a comprobar entonces la evolución de los viñedos.

Ahora, pasadas casi dos semanas, "se ve claramente cómo se manifiestan en cada cepa" las consecuencias de la helada, agravadas por un invierno y primavera secos y la consecuente escasez de agua en el suelo, lo que afecta a la recuperación de la vides.

En todo caso, "el balance definitivo se verá en las vendimias", ha resumido el diputado.Aginako ha recordado que los seguros son "la mejor herramienta de prevención para evitar este tipo de situaciones en un sector que no tiene techo" y ha lamentado que en Rioja Alavesa solo el 40 % de la superficie esté asegurada, cuando es una comarca con "monocultivo y una dependencia casi total de la viña".

Por ello la Diputación trabajará para concienciar a los agricultores sobre la conveniencia de estar asegurado, una opción mucha más extendida en los municipios donde también tienen cultivos extensivos de guisantes, habas y cebadas, que la helada también castigó el pasado 28 de abril.

Con este objetivo la institución foral ha incrementado en los últimos años las ayudas para "animar a la contratación" de seguros, que han pasado de 40.000 euros en 2015, a 100.000 el año pasado y 125.000 en el presente ejercicio".

"No es una póliza barata y por eso estimamos que necesita este apoyo", ha resumido Aginako, al tiempo que ha avanzado que la Diputación intentará de manera paralela mejorar las condiciones de estos seguros, que solo garantizan 0,60 euros por kilo, un "precio corto" para una zona de "vitivinicultura de calidad como es Rioja Alavesa".

Parta paliar las consecuencias de la helada la Diputación habilitará medidas adicionales como el aplazamiento de pagos fraccionados y algunas compensaciones fiscales, así como la concesión de préstamos blandos en colaboración con el Gobierno Vasco.