oion - El Ayuntamiento de Oion ha logrado terminar el ejercicio de 2016 con un superávit de 316.000 euros. La clave para lograrlo ha sido sencillamente controlando el gasto corriente y sin que el capítulo de inversiones se viera afectado en modo alguno.

Este resultado ha sido certificado por la Diputación Foral de Álava y el miércoles, el alcalde, Eduardo Terroba, informó de la noticia a los miembros de la corporación municipal en el Pleno ordinario, al que tampoco en esta ocasión asistió ningún concejal del Partido Popular.

El sorprendente resultado es fruto de varias medidas puestas en marcha durante el ejercicio pasado. Así, 124.000 euros son de ingresos no contemplados. “Dentro de esos ingresos hay una parte importante que se corresponde con el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), lo cual es un síntoma de que la economía en Oion va mejor”, tal y como especifica el alcalde.

Otra parte de esa cifra es el resultado de la regularización urbanística de una parte del polígono industrial que estaba fuera de ordenación. Al parecer, en la época de desarrollismo, hubo un aumento de edificabilidad en una empresa determinada, mediante la construcción de unos pabellones, que no se debía haber hecho de esa manera. Tras años de gestiones, litigios y negociaciones ahora se ha arreglado su situación y, obviamente, también se ha cobrado por ello.

El resto del superávit se corresponde con el denominado Capítulo II, el del gasto corriente. En concreto, se debe gracias a la gestión de control del gasto en festejos por parte del concejal, José Antonio Tarragona, ya que en las últimas fiestas de 2015 se ahorraron 30.000 euros y en las del año 2016 se ha vuelto a bajar en 21.000. “Hemos reducido en dos años 50.000 euros solamente del programa de las fiestas de agosto, principalmente eliminando el gasto de la plaza de toros, porque no merecía la pena”, explican desde este Consistorio.

Otro de los ahorros ha venido dado por el estudio de los contratos del consumo eléctrico por parte del Consistorio. El alcalde reconocía que “nos encontramos con instalaciones, como la de la piscina cubierta, que al transformarla en un gimnasio, nos ahorra un enorme consumo”.

telefonía A ello se suman contratos de elevada potencia en dependencias que no lo necesitaban “porque alguien en su día dijo que vamos a meter 50 kilovatios, cuando no era necesario”, destaca.

Además de ello, también se ha reducido el gasto en telefonía, donde tenían muchos contratos no homogeneizados, con diversas empresas, “y en vez de gastar 10.000 euros en teléfonos lo hemos bajado a 7.000”, añade el primer edil.

También se ha logrado gastar menos en lo referente al mantenimiento de los espacios deportivos. No había un único contrato y al unificarlo con el capítulo de agua y jardín, se ha conseguido reducir mucho el gasto.

Con lo que se ha logrado ahorrar el Ayuntamiento ya esta planificando lo que puede hacer. Según Eduardo Terroba, una parte de ese superávit irá destinado al programa de eliminación de barreras arquitectónicas, siguiendo un estudio que ya estaba realizado en el año 2002 con todos los puntos conflictivos de Oion, pero que llevaba años durmiendo en el fondo de un cajón. Esta propuesta partió de EH Bildu y fue apoyada por el equipo de gobierno.

Asimismo, con esos fondos también, se ha procedido a cambiar la iluminación de la torre de la parroquia con bombillas LED. Ante ese momento del cambio había un consumo de 16.000 vatios y con el nuevo sistema se ha reducido a 1.000.